“…¡Oh!”
“…Hermana, ¿Estás bien?”
Leonia estaba preocupada por Varya.
Las dos esperaron a que se abriera la puerta durante un rato frente al salón de banquetes, donde se estaba llevando a cabo un elegante banquete.
Ha pasado un tiempo desde que se ha celebrado un banquete, en la puerta ya no pasaban nobles.
Significaba que todas las personas se habían reunido. Es decir, tenían bastantes ojos frente a ellas.
“…Estoy temblando un poco.”
“…¿Quieres que te cuide la espalda?”
“…Está bien.”
Varya sonrió suavemente.
“…Originalmente, pase lo que pase, cuando el personaje principal aparece será el momento más emocionante para hacerlo.”
“…¡Oh! ¡Eres tan genial!”
“…Fingí ser el duque un poco.”
“…Incluso si no imitas a tú papá.”
Leonia extendió su brazo derecho, Varya naturalmente colocó su brazo izquierdo encima de él.
Las dos, no importa quien vaya primero, se tomaron de las manos con fuerza.
“… Mi hermana es el personaje principal.”
“…Tu señorita también.”
“…¡Yo siempre soy la protagonista!”
Las dos hicieron contacto visual y sonrieron.
Miraron directamente a la puerta del salón de banquetes.
Luces brillantes y fuertes ruidos saliendo de debajo de la puerta, tocaban los dedos de sus pies.
“…Estás jugando fuerte. ”
Leonia frunció el ceño como si fuera de plástico.
“…¿Dónde puedo sorprenderte?”
Los caballeros que custodiaban la puerta firmemente cerrada, la abrieron con entusiasmo apresuradamente, con una sola palabra de la niña.
Al mismo tiempo, la atención de la gente se centró en la entrada.
Innumerables ojos se dirigieron hacía Leonia y Varya y las observaron.
Varya se estremeció, pero no tuvo miedo gracias a la mano que Leonia le sostenía junto a ella.
En ese momento, gracias a su cabello bien recogido, pudo sentir que los pendientes expuestos brillaban.
No solo Leonia era quien tranquilizaba a Varya en este lugar. Paul que ahora no se encuentra estaba calmando a Varya con sus pendientes.
“…Varya no tienes nada que temer ahora ”
“…La hija del duque de Voreoti.”
El guardia del palacio que custodiaba la puerta de entrada vaciló y se detuvo frente a ella.
“…En este banquete, la señorita…”
“…No vine aquí cuando era niña.”
Leonia quien entiende todo lo que decía el guardia cortó sus palabras, sacó algo de su pecho y se lo tendió.
Justo antes de que se fuera Paul le otorgó un poder notarial de Duque.
“…Vine aquí en nombre del Duque de Voreoti, así que no hay problema.”
Los ojos del cortesano se agrandaron al leer el poder que tenía frente a los ojos.
“…¿Hay algún problema?”
“…¡Uh! No.”
“…Entonces haga saber qué estamos aquí.”
Leonia dio unas palmaditas en el frente del salón de banquetes.
No le gusta mucho el Allor que ocupa el centro del salón de banquetes mirando con mal gusto.
Con los ojos agudos llenos de disgusto e incomodidad, los aristócratas que estaban allí ocupaban sus asientos en silencio.
‘…Hay un donante de esperma.’
Remus Allor, cisne pelirrojo.
A su lado, un cabello rosado muy bonito también estaba allí.
“…Bueno entonces, la persona a tu lado es…”
Un hombre de la realeza miró a Varya junto a Leonia que frunció el ceño, mientras observaba a Varya su rostro se puso rojo.
“…Eres una persona preciosa para tu padre.”
Leonia se rió, los ojos de Varya se abrieron de par en par.
Al mismo tiempo, los pendientes en forma de gota de agua unidos en las orejas inmaculadas de Varya, temblaron como las ostras, coincidían muy bien con el pálido rostro de Varya.
“…Eres la hija del Conde, Varya Eruban.”
“…Si…”
Varya intervino con cautela.
“…Muy alto, por favor.”
Quería que todos escucharan.
Varya Eruban deseaba encontrar un camino, para declarar que abandonó a su familia y se dirigió a Voreoti.
“…¡Vo, Voreoti…”
“…Leonia Voreoti.”
Leonia amablemente corrige las palabras del caballero que tartamudeaba y gritaba.
El caballero se estremeció, mucho más que antes, pero está vez dijo su nombre sin equivocarse con buena voz.
“…¡Duque en función Leonia Voreoti!”
“…Eres la hija del Conde, Varya Eruban.”
Las dos se encontraron con una fuerte presentación de la corte real.
Aparecieron brillantemente juntas.
“…Innumerables ojos se enfocaron en las dos personas caminando por el salón de banquetes.
“…¿Es la chica Voreoti?”
“…¿Cómo está la señorita aquí…?”
“…¿No escuche eso? ¡Es un duque!”
“…¡Ah!”
Los aristócratas reaccionaron con sensibilidad a las palabras ‘representantes del duque’ que la corte imperial había convocado hace tiempo.
“…¿Entonces el Duque no vendrá?”
“…Escuché que hay una avalancha en el norte.”
“…Parece que fue a lidiar con eso.”
“…¿Pero dijo que ya había confiado a la señorita como representante?”
“…No tiene que preocuparse por su sucesor.”
La aparición de Leonia demostró que la sucesión de la familia del Duque de Voreotii estuvo exenta de fallas, y que se hizo muy bien.
Es una prueba de que el Ducado Voreoti es lo suficientemente fuerte como para que no haya problemas, incluso si el duque de Voreoti pasa inmediatamente el título a su pequeña hija.
Sin embargo, más que el tema de actuar como duque, había otra cosa que llamó la atención de la gente.
“…¿La hija del Conde Eruban?”
Reconocerán a Varya como una dama.
“…¿Se ha casado con el vizconde Allor?”
“…Esa fue la segunda.”
“…¿Eruban tuvo dos hijas?”
Los ojos de la gente están en la dirección de una mujer hermosa al lado de Leonia.
El murmullo estuvo acompañado de admiración y muchas dudas.
“…¡Oh! Eso es realmente sorprendente…”
La dama que reconoció a Varya hace un rato, dió unos golpecitos y tocó sus labios con el abanico.
“…¿Eres tan bonita?”
Cuando se trata de la hija de la familia Eruban la gente común suele poner a su segunda hija, Rota, en primer lugar.
Ella era una belleza linda y adorable con su cabello rosa brillante, independiente de cualquiera que la mirara.
Tenía que permanecer en la memoria de la gente aún más porque se casó con la familia del vizconde Allor, que era una persona poderosa en el mundo.
Sin embargo, la hija mayor de Eruban no es muy conocida.
El Conde Eruban no lo ocultó a propósito.
Cuando abría la boca, de lo único que estaba orgullosa era de su segunda hija, Rota.
Los que sabían de ella y recuerdan a la hija mayor, sabían que tenía una cabeza con un cerebro enorme.
Gracias a ello fue contratada como administradora en el Ministerio de Finanzas.
Así que, la aparición de Varya el día de hoy fue todo un impacto.
“…¿Estarán equivocados los rumores?”
Alguien se asombró.
“…Es tan hermosa.”
Nadie podría negar eso, todos tenían la misma opinión.
Lo primero que llamó la atención de la gente fue el cabello rosado apagado de Varya.
Su cabello, trenzado pulcramente brillaba débilmente bajo las ornamentadas luces de araña.
No era algo rociado o pintado a mano, era la belleza creada por el color natural del cabello de Varya.
Mientras bajaban los ojos, un vestido negro envuelto alrededor de su cuerpo mostraba su noble figura.
Su vestido que emite una luz suave recuerda a un cielo nocturno estrellado.
El negro oscuro reveló todos los contornos del cuerpo de Varya a la perfección, pero no se veía superficial en absoluto.
La única exposición en el vestido negro que envolvía el cuerpo de Varya era su pierna derecha, que estaba expuesta cada vez que caminaba por su falda abierta.
“…¿No es extraño?”
Varya, nerviosa, susurró suavemente.
“…Todo el mundo te mira porque eres muy bonita.”
“…Siento como si mi corazón fuera a salir de la boca.”
‘…Vaya, vaya..’
Varya respiró hondo y trató de aliviar su tensión. Al ver su pecho subir y bajar, muchos hombres nobles tosieron y sus orejas enrojecieron.
“…Esos sujetos tienen ojos para ver.”
Leonia los miró y dijo que eran iguales.
“…Si sale, te lo volveré a poner en la boca.”
“…Gracias por salvarme.”
Leonia miró a Varya, que estaba demasiado rígida.
“…¿Estás demasiado nerviosa?”
“…Por supuesto…”
El sudor goteaba de las palmas de las manos de Varya.
Cuando entro al salón de banquetes, se sentía tranquila. Sin embargo, al cruzar el centro de la amplia habitación y atrapar las miradas al llamar la atención, pareció que desmayaría.
“…Hermana.”
Leonia torció levemente sus pasos.
El Conde Eruban, que las encontró, tenía la boca abierta, se dirigía hacía ellas.
La presa, cuyo propósito de venir aquí, era bien conocido.
Se acercaba pero, Varya estaba demasiado nerviosa, para encontrarlo inmediatamente.
“…Esto es realmente sorprendente.”
En ese momento, el marqués Orthio apareció de repente que observó de cerca.
“…¡Marqués de Orthio!
Leonia lo saludó calurosamente.
“…¡Oh! Orti…¡Oh! Marqués…!”
Varya estando en tal estado de nervios tartamudeó.
Afortunadamente ante los ojos ajenos ella no era una figura destacada, por lo que los demás no se dieron cuenta.
“…¡La Marquesa también ha venido!”
Cuando Leonia dió la bienvenida con entusiasmo y alegría a la Marquesa de Orthio, el conde Eruban que se acercaba detuvo sus pasos.
“…Mi esposa dijo que quería saludar a la jóven duquesa.”
“…Estoy en el camino, quizás interrumpí.”
Preguntó la marquesa con cautela, todavía tenía un rostro suave y hermoso.
“…No puedo.”
Leonia se rió suavemente, por el contrario ella ha sido de gran ayuda.
“…Pero la persona a tu lado…”
La Marquesa de Orthio miró a Varya con ojos llenos de curiosidad, también el Marqués miró fijamente a Varya.
“…La presentación es tardía.”
Leonia presentó Varya por primera vez.
“…Marqués, Marquesa mi compañera la señorita Varya.”
“…Señorita Varya ellos son el Marqués de Orthio y su esposa, han sido amables conmigo desde que era niña.”
Leonia presentó deliberadamente a los Marqués de Orthio a Varya primero.
La pareja Orthio se sorprendió bastante por esto, originalmente, los nobles de alto rango tenían que ser presentados a Varya primero.
Sin embargo, Leonia presentó a Varia primero al Marqués de rango menor.
Este fue un punto muy importante.
“…Originalmente, la señorita Varya iba a venir aquí como compañera de mi padre.”
Leonia incluso presentó a Varya.
“…Pero mi padre está ocupado, así que vine en su lugar espero ser suficiente para estar aquí conmigo.”
“…Un placer conocerlos, mi nombre es
Varya.”
Ante el saludo de Varya, las expresiones de la pareja se volvieron más crípticas.
De hecho, las dos personas sentían mucha curiosidad por Varya, la curiosidad única del mago iba dirigido a Varya.
“…¿Eres la compañera del Duque?”
“…Sí, sí.”
Varya, incapaz de relajarse, movió torpemente la cabeza.
“…¿Y la hija del Conde Eruban…?”
“…Si.”
Una sonrisa hechizante pronto apareció en la esquina de la boca del Marqués Orthio, quien había soltado las últimas palabras.
“…Cariño, ¿Qué pasará si sonríes así frente a otras personas?”
‘…Celos.’
El Marqués refunfuñó levemente.
“…¿De quién están realmente aquí?”
Dijo que lo regañaría cuando volvieran más tarde. El marqués palmeó a escondidas el trasero de su esposa.
“.. Ustedes dos son muy cariñosos.”
Leonia se rió. La inteligente duquesa no desaprovechó esta oportunidad.
“…En realidad, mi padre también tiene una buena relación y es cariñoso con Varya. Estos pendientes ¿Pueden ver esto?”
“…Sí. ¿Quizás todas las damas aquí lo han visto?”
Las palabras del Marqués eran ciertas.
Después de la presencia de Varya, el cabello rosado brumoso, su vestido negro entallado, lo que llamo la atención de la gente, lo que la atrapo fueron los aretes en forma de gota de agua.
“…Mi padre se lo obsequió.”
“…¡Dios mío! ¿Dijiste que el Duque los dió como un regalo?”
El Marqués que advirtió las intenciones de Leonia dijo aquello en voz alta.
Los nobles que solo los miraban con ojos ciegos y oídos sordos, habían hecho de todo y también eran ruidosos.
“…¿No es el vestido demasiado hermoso?”
“…Por supuesto, es un vestido confeccionado en el Este.”
El Marqués alabo a Varya por realizar un gran trabajo.
Varya, que se tiñó la cara de rojo, se mostró tímida. La Marquesa de Orthio es una mujer tan hermosa, incluso ella misma puede ver el corazón latiendo fuertemente.
Ella es una buena persona.
“…Es el vestido de mi bisabuela.”
Leonia no se detuvo, se jacto del vestido negro que llevaba Varya, señalando con su mano.
“…Este vestido, se ha transmitido de generación en generación. Después de todo, también fue un regalo de mi padre a la señorita Varya.”
“…¡Oh! Dios mío.”
Está vez el Marqués Orthio real y sinceramente quedó sorprendido.
Un vestido que se ha transmitido de generación en generación, usado por alguien que no sea una mujer de la familia, es un hecho en la historia que no debía perderse.
Incluso el Marqués al que no le gustan los chismes, imagino extrañas fantasías al respecto en su cabeza, entre Paul y Varya.
‘…Fantástico.’
Leonia miró al marqués y sonrió con deleite.
Incluso el Marqués de Orthio que era de esa manera reaccionó así ¿Qué pasa con los otros nobles, estarán aterrorizados?
No mintió, Leonia dijo solo la verdad.
Paul y Varya tienen una buena relación, el vestido de Varya, los pendientes y complementos, son un regalo de Paul ese hecho es real.
El compañero original de Varya también sería Paul.
Pero aún no salen juntos. Leonia no sintió la necesidad de aclarar ese punto.