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 “Si mira fijamente los ojos de la otra persona podrá conocer sus pensamientos más profundos con solo desearlo.”


Y era cierto, era su habilidad, Ijana podía leer los pensamientos de otras personas.


“¿Es realmente posible que lo sepas…?”


“No puedo decírselo.”


“Si no quiere decirlo, podría probarlo alteza.”


Ijana, que quería probarlo, inclinó su cabeza en un ángulo donde estuviera a la altura de mis ojos.


Cuando su cara se acercó, mi corazón empezó a latir tan rápido que no podía respirar.


A la vista de los demás Ijana hizo lo posible por acercarse a mi cara y estar a la altura de mis ojos, era una visión algo romántica si lo pensabas un poco.


Los ojos extraños que leían los pensamientos de otras personas brillaban claramente como si estuvieran tratando de leer mis pensamientos.


‘¡Oh, es demasiado~! Se ve tan guapo, cuando me mira tan despreocupadamente…’


Se me ocurrió la idea sin darme cuenta.


‘¿Él también leyó ese pensamiento?’


Aunque decidí no pensar en nada, no tenía talento para filtrar sabiamente mis pensamientos.


‘No, ¿Hay acaso alguna manera en que pueda filtrar los pensamientos que se me vienen a la mente?’


En ese momento, Ijana dijo:


“Pequeña mocosa.”


Era una palabra algo grosera, pero no sonaba de esa forma cuando salía de sus labios. No me pareció que aquellas palabras tuvieran la intención de dejar en claro que le molestó.


Un arroyo de sudor frío me cayó por los hombros.


“Esta vez dejaré pasar esos pensamientos descuidados. Es bastante extraño ser criticado por una mujer que nunca había visto antes. Tengo un mal presentimiento al respecto.”


‘¡Oh, Dios mío! ¿Si leyó esos pensamientos?’


Me sorprendió, y una sonrisa débil cayó en la cara de Ijana.


Era su sonrisa lo que esperaba. Ijana soltó mi mano lentamente. Sólo por un tiempo le tomé la mano, pero el toque de la mano casi no desapareció.


La mano fría de Ijana en mi palma.


Siento como si aún estuviera en contacto. Continuó con una sonrisa débil.


“Hay cosas que en ocasiones es mejor no escucharlas…”


Luego inclinó la cabeza para encontrarse con mis ojos.


“No quiero decir nada más ya que has dicho algo como eso. Me pareció muy divertido”.


Dio un paso hacia atrás.


“Pero era prematuro provocarme. Ya que me encanta el jengibre.”


Tenía razón. Actué apresuradamente sin pensar en las consecuencias. Pero no me arrepiento. Por mi mala conducta, Ijana vino a mí, no hacia Relais.


Abrí una oportunidad.


Aunque pudiera volver al pasado, habría hecho la misma elección. Sabía que debía provocarlo a sabiendas que lee los pensamientos de otros.


Por supuesto, en ese momento, Ijana me llamó “Jengibre”.


Eso no me gustó, si pudiera cambiar algo del pasado, quizás sería lo único.


“Me gustas Ginger.”


“… ¿Qué?”


Dio otro paso atrás y dijo:


“Te llamaré al palacio pronto. Estoy ansioso por ver cómo me llamarás entonces.”


Miré en blanco su cara sin responder correctamente. Increíblemente, es una belleza suave.


Estaba estupefacta.


No era una sonrisa débil, un poco incompleta, sino una sonrisa perfecta.


Fue después de sus ojos fríos, lo que me hizo temblar, también desapareció en algún lugar.Sus ojos estaban dibujados en líneas suaves.


Era evidente.


Su sonrisa perfecta hacia Relais en la novela se convirtió en mía.


Ijana me dio la espalda y ya estaba caminando. Pero ya no estaba en un lugar donde él parecía inalcanzable.


No podía quitarme de la cabeza su experiencia. La suave sonrisa de Ijana.


‘¿Qué significaba su sonrisa? Mis pensamientos fuerón la causa de su sonrisa, ¿verdad?


Pero la próxima vez que lo conocí, pensé que nunca debía jurar.


Una cosa era que era posible con la premisa de que había un talento para filtrar pensamientos.


Cuando Ijana desapareció completamente, Relais se me acercó como si esperara a que Ijana se apartará para aparecer ante mí.


La cara de Relais cuando me miró, fue ligeramente más desagradable de lo que recordaba.  Parecía distante de su calma habitual.


“Ginger Torte, ¿Sabes lo que tengo que decirte no?”


“Bueno”,


Relais me mostró el collar rojo que colgaba de su palma. Me preguntaba por qué no lo había puesto todavía en su cuello.


“¡¿Cómo pudiste ordenarle a Kiki que robara mi collar?! ¿Cómo hiciste una imitación para reemplazarla? ¡Estoy tan avergonzada de tus acciones!”


Respondí tranquilamente. Naturalmente, como si no supiera nada.


“¿De verdad? ¿Qué asó entre Kiki y tú? No sé de eso. Quizas el quería tu collar, realmente no sabía nada sobre este asunto en particular.”


“Digas lo que digas yo lo sé… ¡Tú le pediste a Kiesson Mickaelson que robará mi collar!”


“Relais, en serio. Baja la voz. No estamos solas nosotras dos aquí.”


Puse mi dedo índice en mis labios y la regañé.  Luego la cara de Relais se puso como si estuviera a punto de explotar.


“Y no me interesa en absoluto tu collar. Tengo muchos mejores collares que eso. ¿Por qué querría algo tuyo para empezar? ¿Te gusta la idea de que alguien mas anhele tus cosas no es así?”


Lo dije y miré el collar rojo que parecía insignificante en sus manos.


Era algo que ya no necesitaba.


Ahora que le he hecho sospechar acerca de “que puede leer los pensamientos”, el collar se ha convertido en la cosa olvidada que unía a Ijana al personaje principal.


Ya no me interesaba lo que no necesitaba.


Además, esperaba que Relais evitará e uso de su collar frente a Ijana hasta el final y así ya no podría levantar ningún interés en él.


Tenía qué no hacerla sospechar más.










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