‘Oh, he escuchado que es responsable de la seguridad de uno de los palacios donde se alojan las princesas. Quizás también esté a cargo de esa princesa.’
Decidí no preocuparme más por ellos, así que me di la vuelta y traté de alejarme. Pero me detuve cuando Carsein dijo “¿A dónde van? ¡Están saliendo del palacio!”
“Sí, lo están haciendo.”
Sorprendentemente, los dos estaban pasando por el Palacio Imperial. No podía entender esta situación, así que parpadeé un momento, viendo a Carsein cara a cara.
Entonces, de repente, una idea pasó por mi cabeza.
“¡Vamos a seguirlos!”
“¿Eh? ¿Por qué?”
“No sé de qué reino es, pero es una princesa. Si algo malo sucede mientras Sir Lars la escolta, nuestro imperio debe asumir la responsabilidad. Además, está aquí como candidata a ser prometida del príncipe heredero. ¿Qué pasa si hacen un escándalo…?”
“Tienes razón. ¡Date prisa antes de que se vayan!”
“Claro.”
Carsein y yo los seguimos rápidamente. Después de caminar un buen rato fuera del Palacio Imperial, continuaron pasando por el lugar donde había mansiones nobles. Cómo caminaban muy rápido, Carsein y yo apenas pudimos alcanzarlos cuando llegaron al centro de la ciudad, donde había muchas tiendas para nobles.
“¿Hermano?”
“¿Sein? ¿Por qué están aquí, Lady Monique?” Preguntó Sir Lars con expresión de vergüenza.
La princesa que miraba a Sir Lars me preguntó rápidamente con entusiasmo “¡Oh, Lady Monique! ¿No nos habíamos visto antes?”
“Si, así es…”
“Encantada de conocerla. Soy Frincia de Lua, la segunda princesa del Reino de Lua. Cuando te vi el otro día, quise presentarme, pero no pude.”
“Oh, ya veo. Mi nombre es Aristia La Monique, hija mayor de la familia del Marqués Monique.”
A diferencia de la princesa del Reino Eet, que arrogantemente me ordenó que me presentara primero, ella casualmente se presentó.
“Siempre he querido conocerte, pero después de ver al príncipe heredero, realmente deseaba ser amiga tuya porque tenía mucha curiosidad por saber quién eras.”
“¿Perdón? ¿A qué se refiere…?”
¿Por qué quiere ser amiga mía? El Reino de Lua es un país fuerte como el Reino de Lisa. Como princesa de tal reino, ¿por qué quiere acercarse a mí? Dejando a lado los rumores sobre mí, soy la prometida del príncipe heredero.
‘¿Ella piensa que construir una amistad para llegar a él funcionará, o hay algo que ella quiere de nuestra familia?’
Como si se diera cuenta de que estoy siendo cautelosa con ella, la princesa sacudió la cabeza y dijo “Ah, no pienses que quiero acercarme al príncipe heredero por mi amistad contigo. No me interesa en absoluto. No me gustan los hombres de corazón frío.”
“…”
“No tengo ninguna razón en particular. Sólo tenía un poco de curiosidad por la hija de la famosa familia Monique. Y también me dio curiosidad de que se uniera a los caballeros como prometida del príncipe heredero. No es algo que pueda hacer cualquiera, ¿verdad?”
Como no tenía nada que decir, me quedé en silencio. Mientras me miraba fijamente por un rato, ella dijo con una sonrisa, “Ya que nos hemos encontrado, ¿por qué no comes conmigo? Creo que ya es hora de la comida.”
“Bueno, creo que es mejor que regreses al palacio…”
“Por favor. Como he salido, no quiero volver sin ver nada. Quiero ver cómo es la capital del imperio.”
“Sin embargo…”
“Está bien, ¿por qué no? Sin embargo, tienes que volver al palacio después de comer.”
Cuando Carsein intervino, ella dijo con una sonrisa “Gracias. ¿Puedo saber tu nombre?»
“Mi nombre es Carsein De Lars. Soy el segundo hijo del Duque Lars.”
“Oh, usted debe ser el hermano de Sir Lars. Encantada de conocerlo. Entonces, Sir Carsein, ¿podría usted mostrarme un restaurante apropiado?”
“Hay uno bueno si caminas un poco más hacia allá. Yo la guiaré.”
De pronto, ellos dos se juntaron y caminaron al restaurante de buen humor
‘¿Qué diablos? Carsein, ¿por qué estás emocionado?’
Me sentí un poco avergonzada, pero caminé con Sir Lars detrás de ellos.
Mientras los seguía, percibí de inmediato una sensación de vacío y me di la vuelta. En ese momento, vi a Sir Lars observando a los dos con la mirada perdida, inmóvil. Suspiré inconscientemente. ¿Qué le pasa a Sir Lars?
“¿Sir Lars?”
“… ¿Me llamo, Lady Monique?”
Sorprendido, volvió a caminar. Se apresuró a alcanzarlos.
Mientras intentaba seguir su ritmo, dije con cuidado, “Sir Lars, parece que usted está a cargo del palacio donde se aloja la princesa, ¿verdad?”
“¿Eh? Oh, sí, lo estoy.”
“¿Qué clase de persona es la princesa? No puedo entenderla.”
De repente, se emocionó y comenzó a hablar de ella con una voz entusiasmada, lo que era muy inusual porque siempre estaba tranquilo y disciplinado.
“Es amable con sus subordinados y con los caballeros del lugar. Por supuesto, ella no es amable con todo el mundo. Cuando es necesario, muestra su dignidad. Tuvo algunos roces con otra princesa, pero fue muy serena…”
“…”
“Aunque su reino no es comparable a nuestro imperio, se mostró segura y elegante como la princesa del poderoso Reino de Lua. A mis ojos, ella parece una princesa muy ideal.”
“Oh, ya veo.”
Asentí dócilmente, ya que estaba un poco sorprendida por sus buenas cualidades. Conozco a Sir Lars desde hace bastante tiempo, pero nunca lo vi elogiando a una dama así. ¿Es la princesa Frincia una gran mujer?
Me sorprendió bastante que Sir Lars, que era directo y de corazón frío como su padre, hablara de ella con emoción.
Con la mirada desconcertada, seguí a Carsein y a la princesa Frincia. Cuando llegamos al restaurante sólo para nobles, el más popular de la calle principal, Carsein me dijo antes de sentarme “Pedirás filete y salmón, ¿está bien? Si eliges la ensalada de la última vez, te la serviré yo. ¿Entendido?”
“… ¿Por qué me estás molestando otra vez, Carsein?”
“Como dije la última vez, la fuerza física es lo más importante para un caballero. Debes comer bien. Nada de ensalada o menú de verduras, ¿de acuerdo?”
“De acuerdo.” Asentí de mala gana. La última vez no me dejó elegir mi comida. El día que dijo que me invitaría a cenar para celebrar que se había convertido en caballero, me obligó a cambiar el menú cuando pedí verduras. Hoy lo está haciendo de nuevo.
Pero independientemente de si me gustaba o no, Carsein sonrió con una expresión feliz.
La princesa Frincia nos miró y comentó, viendo a Sir Lars, “Sir Lars, ¿podría por favor elegir un menú para mí?”
“¿Yo? ¿Quieres que seleccione el menú para usted?”
Sir Lars respondió, tartamudeando un poco, lo cual era muy inusual. Cuando lo miré con curiosidad, me sorprendió ver que se sonrojaba ligeramente. Levantó el menú con una mirada perpleja y dijo “Bueno, puede que te guste la carne de res, pero a veces la carne aquí no sabe bien… Oh, ¿qué tal pescado? Los platos de pescado son muy buenos aquí. ¿O qué le parece del pastel de trufa?”
“¿Eh?” Carsein, que estaba tratando de elegir su menú, levantó la cabeza.
Mirando a su hermano con pena, dijo, “El filete de carne sabe bien aquí, princesa.”
“¿De verdad? Entonces, me encantaría comer filete. Agradezco la recomendación de Sir Lars, pero el menú del pescado es tan diverso que es difícil de elegir. Permíteme pedirlo la próxima vez. Lo siento.”
“Oh, está bien, Princesa.” dijo Sir Lars tímidamente, cubriendo silenciosamente su cara con el menú.
Tan pronto como ordenamos y la comida comenzó a salir, tres de nosotros, incluyéndome, disfrutamos de la comida, charlando de varios temas.
La princesa Frincia me hacía todo tipo de preguntas y yo respondía. Carsein me interrumpió en medio de la conversación, pero Sir Lars sólo estaba comiendo de una manera rígida sin participar en la conversación.
Como si le molestara que Sir Lars permaneciera en silencio, la princesa, se puso a hablar de varias cosas, incluyendo sus cosas privadas, y de repente dirigió la mirada hacia él y dijo “¿Sir Lars?”
“Oh ¿me ha llamado?”
Su voz no era tan fuerte, pero él respondió sorprendido. Por ello, dejó caer al suelo el cuchillo que sostenía con un ruido agudo. Mirando el cuchillo y a Sir Lars alternativamente, con una expresión absurda, Carsein preguntó en tono desconcertado “¿Estás enfermo, hermano? Hoy estás muy raro.”
“Oh, nada, Sein. No importa.”
“Si te sientes incómodo, habla conmigo.”
Sir Lars asintió, ruborizado. Cuando bajé el tenedor, pensando que había cometido un error absurdo que no encajaba en absoluto, escuché una voz familiar.