“Ni siquiera se dignaron a asomar sus narices por aquí cuando fue una situación difícil antes, pero ahora que se dio esta situación, está claro que apenas encontraron un motivo para venir y fingir ser visitantes ansiosos.”
“Eso es un hecho, habla con sabiduría Emperatriz madre.”
“Je, parece que todo el mundo ha estado bromeando durante bastante tiempo. ¿Pero viniste aquí sabiendo de nosotros, qué Letrán y yo, estábamos entre esos visitantes?”
“El Príncipe es un visitante de mi hijo, no mío, así que no importa.”
“Desconozco desde cuando es qué nuestros segundos hijos se volvieron tan cercanos.”
“De ahora en adelante, parece que seguirá siendo de esa manera.”
Realmente se siente como hace mucho tiempo que no teníamos una conversación como esta.
Por un lado, todavía le guardo un poco de rencor por el pasado, pero ¿por qué su apariencia inmutable es tan cálida ahora?
Como dijo Elizabeth, durante unos días, había estado huyendo de los nobles que venían locamente como si insistieran en que tenía que demostrar algo en esta ocasión.
... No solo eso, sino que también había otras razones.
El jardín fuera del balcón bellamente decorado del Palacio de la Emperatriz estaba teñido con el color dorado del otoño, ya que el final del verano había retrocedido por completo.
Ahora el otoño y todos los festivales de verano han llegado a su fin.
Como referencia, el príncipe Ali Pasha también regresó a Safabi.
Él y Rachel estaban tan tristes que ambos se turnaron para despedirse tanto que Elías se burló de ellos mientras sacaba la lengua y simulaba arcadas.
‘Mmmm, quizás por el bien de mi pequeña hija, creo que debería hacer lo posible para evitar que nuestro país y el país Safabi entren en Guerra Fría como en el pasado...’
“De todos modos, mi sobrino arrogante hizo un trabajo bastante radical. Me alegro de que haya terminado bien, pero la situación va a ser un poco ruidosa por un tiempo mientras mi familia y la suya no puedan evitar tomarse de la mano.” Dijo la Emperatriz Elizabeth.
“Nunca se sabe cuál será más fuerte.”
“Todavía tienes que tener confianza sin ser inútil. Estás lidiando con las sirvientas eran parecidas a mapaches, lo resolverían, pero parece que la mayoría de las mujeres están de tu lado, así que no hay nada de qué preocuparse. Deben haber tratado de arrancar los ojos de sus maridos, preguntándoles por qué no escucharon tu versión después de que terminó el juicio.”
‘¿Sería de ese modo?’ Decidí dejar de imaginarme a la dulce y benévola condesa de Baviera tratando de sacarle los ojos al Conde.
“Entonces, ¿qué vas a hacer a continuación?”
“Primero, necesitamos reducir drásticamente los gastos de nuestra familia. Pero Emperatriz…”
“¿Pero dices…?”
Elizabeth, que sostenía elegantemente una taza de té, arqueó sus cejas rojo oscuro como si preguntara qué era. Después de un momento de vacilación, pregunté en un tono relativamente cauteloso.
“Al final del juicio, el Príncipe Heredero trató de presentarse como testigo. ¿Tiene alguna conjetura sobre qué tipo de testimonio intentaba testificar Su Alteza?”
“... Bueno, honestamente, tampoco estoy segura de eso. Porque el príncipe no es del tipo de persona que te cuenta todos sus planes…”
‘Ah, ¿Con que así era?’
Si es así, esta es la segunda vez que Elizabeth desconoce por completo las acciones que llevará a cabo el príncipe.
‘¿Qué debo hacer para discutir el asunto estrechamente relacionado con Theobald con ella que desconocía el significado de sus acciones? Dado que es una Emperatriz que protege a su hijastro, podría resultar gravemente herida si insinúo algo de manera equivocada. ¿Elizabeth realmente nunca tuvo sospechas de los actos de su hijastro? ¿Tiene alguna conjetura sobre el hecho de que su hijastro es una persona muy sospechosa?’
Mientras negaba con la cabeza de esa manera, Elizabeth quiso echar un vistazo a mi expresión, pero de repente se dio la vuelta. Para ser precisos, hizo una declaración que no se esperaba.
“Sería un poco gracioso si algo como esto saliera realmente de mi boca*, pero... Para ser honesta, pensé que el incidente de hace tres años y lo que ocurrió en esta ocasión, que tal vez el príncipe todavía podría sentir algo por ti.”
*Está dando a entender que es una “suposición”, que en caso de ser de importancia ella realmente no lo dijo.
“Gracias al caso de agresión de hace tres años, la Emperatriz madre me comprende mejor que nadie. Quiero decir, no realmente a mí, sino al descaro y actitudes de su hijo…”
“¿Sí?”
“Al ver a mi sobrino, pensé que el príncipe tiene el mismo descaro de alguna manera, y pensé que de algún modo ¿por qué no les gusta el príncipe por su actitud? Para ser honesta, como sabes. Incluso yo, al principio, a juzgar solo por tu apariencia, dirigí todo mi odio hacia a ti…”
Pregunté en el tono más respetuoso que pude usar: “Disculpe, Emperatriz Madre, no entiendo en absoluto de qué está hablando. ¿Qué pasa con mi aspecto y por qué me odiabas por ello?”
Al sonido de mi voz absurda y medio quebrada, la Emperatriz Elizabeth me miró sin suspirar mientras jugueteaba con la taza de té, como si estuviera un poco aprensiva.
Tenía la cara completamente congelada.
Por un instante, sus ojos azules parecieron parpadear con curiosidad y luego, gradualmente, comenzó a formarse una extraña sensación de vergüenza.
Hubo un momento de deprimente silencio. Ese fue el caso hasta que Elizabeth, que miraba fijamente mis ojos que comenzaban a distorsionarse hasta el punto que era difícil de describir, dijo en un tono extrañamente escéptico.
“Tú... ¿No sabías nada?”
“¿Puede explicarme a que se refiere?” Respondí.
“No, quiero decir, sobre tu apariencia, esa, la persona con la que tienes un gran parecido…”
“¿Hay alguien así? ¿Emperatriz madre, podría explicarme quién es?”
Una de las sirvientas que se acercó sigilosamente le dijo algo a Elizabeth, pero ninguna de las dos le prestó atención. A diferencia de la Emperatriz, que no estaba segura de qué hacer con ella, gradualmente endurecí mi rostro.
Y fue entonces…
“Pensé que iba a llegar tarde, pero parece que llegué sorprendentemente rápido, hermana. Oh, por cierto, Lady Neuschwanstein también estaba contigo.”
La mirada formal de las dos mujeres se volvió naturalmente hacia el Duque Nuremberg, que entró con gracia y recibió gentilmente.
Por lo tanto, fue un procedimiento perfectamente natural para el Duque, quien de repente se enfrentó al dilema más vergonzoso, al recibir los ojos inquietos de su hermana y los míos al mismo tiempo, inmediatamente se convirtió en un rostro desconcertado.
“No, ¿qué diablos sucede?”
Eso era justo lo que yo quería decir.
* * *
“Quizás más tarde estemos enredados de nuevo en chismes sobre el incesto.”
“¡Oh, no, ni siquiera digas algo tan terrible! ¡¿A ti no te produce nauseas tan solo decirlo?!”
“¡Oh! ¡¿Qué dices?! ¡Solo señalan una sucia realidad que podría…!”
León, quien se agarró la parte de atrás de su pie, que había sido aplastado fuertemente mientras decía tonterías, protestó con una voz llena de quejas, pero Rachel solo mostró una mirada feroz con sus grandes ojos esmeraldas.
“Ahora que se acabó, no volverá a suceder. ¡Y el hermano mayor se deshará de todas las personas que intimidaron a mi madre!”
“Uh, creo que fue lobo negro quien al final resolvió este problema…”
“Era una situación en la que mi hermano mayor no podía intervenir, ¡así que el peleo en su lugar! Después de todo, nunca volverá a suceder, así que deja de decir cosa tan aterradoras y asquerosas como esas…”
Las flechas llovían en el patio frente a los escalones de piedra, donde los hermanos gemelos estaban sentados uno al lado del otro. No era que hubiera ocurrido una guerra o recibieran un ataque, era su hermano de cabello rojo quien intentaba molestarlos, el joven “*autoproclamado” de la casa, y el segundo príncipe, que había visitado con poca frecuencia, estaban teniendo un partido amistoso de tiro con arco.
*Autoproclamado: Que se declara o se ha proclamado a sí mismo como alguien con cierta investidura, dignidad, cargo, título, derecho, estatus o condición. Tiene un uso despectivo.
“¿Por qué no hay un día tranquilo en nuestra casa? ¿Por qué mis hermanos mayores solo se llevan bien con personas que son similares a ellos? Todos actúan tan extraño siendo tan amistosos con esas personas…”
Con tal angustia, León se rascó el cabello dorado.
“¿Crees que el hermano mayor es confiable?”
“¿No es tan obvio? ¿Quién podría ser un caballero tan fuerte como el hermano mayor? Oh, bueno, el joven Duque es similar, pero estará bien porque es amigo de mi hermano mayor. Pero… ¿por qué? ¿Estas celoso?”
“Ahora creo que está bien, pero ese no es el problema.”
“¿Entonces, cuál es el problema?”
‘Los chicos de mi familia tienen la habilidad de hacer explotar las cosas de todos modos.’
Con ese pensamiento en mente, Rachel volvió a deslumbrar sus ojos esmeralda hacía León. Y León murmuró con una expresión ligeramente feroz, tratando de apartarse de la feroz mirada de su hermana gemela.
“¿Mi hermano mayor realmente ve a nuestra madre como a una madre?”
“¿Qué? ¿Por qué dices eso?”
“Para ser honesto, mi querida hermana gemela, parece que tú y yo somos los únicos de entre nosotros que consideramos que ella es nuestra madre. Oh, ¿y tal vez nuestro pequeño hermano? Aunque todo lo que hace es una molestia… Creo que aun así él piensa en ella como una madre también.”
Rachel miró ahora a León, de quien se decía que tenía el sentido más agudo de entre los hombres de la familia, lo miraba con incredulidad.
“¿Qué dices…? ¿Qué estás diciendo de repente? Una locura… ¿Acabas de terminar novelas de detectives y luego, de repente, tus delirios comenzaron a aparecer de esa manera? ¿Crees ahora en ese juicio sin sentido?”
León tuvo que sacudir la cabeza apresuradamente ante la escalofriante imagen de su hermana, que lo apremiaba con fuerza como si estuviera a punto de sacarle los ojos en cualquier momento.
Para ser precisos, negó con la cabeza y asintió casi al mismo tiempo.
“No, no, no es así, no pienso de ninguna forma que nuestra madre sea el problema, es el hermano mayor el problema. No, es un poco problemático decirlo, pero honestamente, ¿alguna vez te has sentido así al menos una vez?”
“¿Qué?”
“Ughh, entonces, ¿crees que la forma en que el hermano mayor mira a madre es la misma que la forma en que tú y yo la vemos? Para ser honesto, cada vez que veo al hermano mayor, solo puedo verlo siguiendo a madre con ojos de cachorro. Bueno, objetivamente hablando, mi madre es sólo uno o dos años mayor que mi hermano mayor, y también es muy hermosa, así que no es como que no pueda entender la razón.” Respondió León.
Rachel se limitó a mirar el rostro de León con un tono más relajado, con un rostro distorsionado por un momento. Un breve silencio pareció pasar sobre el cabello rubio, pero después de un rato, las lágrimas brotaron de los ojos de la niña. Y León estaba perplejo.
“¡Oh no, no llores! ¿Por qué estás llorando? Lo siento, solo me preguntaba si…”
“Eso... Si tú dices eso, alguien más podría estar pensando eso también de nuestra madre.”
“¡No, no es como si lo pensará para intimidarlo! ¡Nunca! ¡No podría! Como dijiste antes, ¡el hermano mayor se deshará de todos ellos! ¡También tenemos a nuestro otro hermano que tiene el único talento de apuntar con su ballesta y sé que si se lo propone su puntería daría justo en el blanco! No llores, por favor…”
“¿Entonces tú? ¿Lo harás tú también? ¿Defenderías a madre…?”
“¡Por supuesto! ¡No hace falta decir que los seres humanos, cuyos cerebros son músculos, necesitan personas talentosas como yo que estén a cargo de la inteligencia! Entonces, deja que el cuchicheo de las personas solo pasé, nos encargaremos de ellos tarde o temprano. Después de todo, si no es de nuestra familia, son nuestros enemigos.”
León se palmeó el pecho con entusiasmo y sonrió con picardía. Rachel, que se sorbió la punta de la nariz enrojecida, también sonrió.
“Parece que realmente es así…”
“Sí. También estaba seguro de esto. Ah, todavía somos niños inocentes viviendo en un mundo de cuento de hadas. ¡Pero este mundo vil…!”
Ante esta nueva ola de lamentos, Rachel no se rio y se encogió de hombros. León tragó saliva seca en busca de algo más ante la sucesiva decoloración en el rostro de su hermana gemela.
“¿Por qué otra vez…?”
“¿Somos niños? ¿No actué como una mujer madura antes? Tus habilidades de actuación también me están matando, ¿verdad? ¡No me trates como a una niña, eres mi gemelo, tu eres el cerebro y yo soy quien lo hace posible!”
“……”
* * *
“Así que el problema de las chicas... Mmm, necesitas la ayuda de tu padre para tener en tus manos lo más fácilmente posible, ¿verdad?”
“Sí, pero no hay esperanza de esa manera. Es un ser humano con un cerebro tan pequeño como el de un ave…”
“¿Por qué?”
“¿Cómo sé eso? De todos modos, tenemos que resolverlo por nuestra cuenta.”
“Lo siento. De todos modos, si ese es el caso, entonces tenemos que resolver el problema al que nos enfrentamos en este momento.”
Estrictamente hablando, fue como verse arrastrado a los problemas de Jeremy, pero Nora realmente no se quejó de eso. No expresó ningún descontento particular por el hecho de que de repente tuvo que pasar medio día a caballo para apreciar el paisaje rústico de un pueblo rural del que nunca antes había oído hablar.
Los ojos de los dos jóvenes, que habían parado a sus caballos para hacerles beber un poco de agua y parloteando mientras admiraban los ondulantes campos de *juncos blancos, todos se volvieron hacia el carruaje ubicado justo detrás de ellos.
*Planta herbácea silvestre de muchos tallos rectos, largos, flexibles y cilíndricos, hojas reducidas a una lengüeta larga y delgada, flores agrupadas en cabezuelas casi terminales y fruto en cápsula.
Era un vagón pequeño y robusto que parecía más una escolta de prisión que un vagón para mujeres corrientes. Jeremy giró su caballo hacia el costado del carruaje y golpeó la ventana con la mano. Luego, la cubierta se quitó suavemente para revelar a una mujer de mediana edad temblorosa con un rostro pálido y cansado.
La situación en la que dos jóvenes y fuertes caballeros amenazaron a una dama de mediana edad, la metieron en un *convoy y fueron a beber a una aldea montañosa con buena agua, fue muy engañosa en algunos aspectos.
*Conjunto de vehículos terrestres o marítimos, generalmente escoltados por otros vehículos, que trasladan mercancía y personas de un lugar a otro, especialmente en una guerra.
Pero si se tratara de una situación que salva vidas, podría verse un poco diferente. Si no los hubieran secuestrado, es posible que ya los hubieran encontrado muertos en un callejón.
“Entonces, ¿dónde viven los testigos para probar que el testimonio del que hablaste era verdadero o no?”
Los ojos de Jeremy, mientras preguntaba lentamente, estaban sorprendentemente lejos de ser crueles.
Una vez más, parecía extrañamente complicado.
Actualmente, Jeremy atraviesa una situación muy complicada con la mujer que sería la madre de Shuli. Para ser más preciso, debería decir que es un sentimiento similar a debilitar innecesariamente su corazón.
Nunca imaginó que fuera por el hecho de que la oponente era la madre biológica de Shuli.
‘Maldita sea, es por esos ojos verdes que se parece tanto a Shuli.’
Ya fueran sus sentimientos más sinceros o la sensación de ser su amigo más cercano y su antiguo rival, Nora, que montaba a su lado en un caballo, hizo un sonido de burla.
“No creo que fuera tan débil contra él en ese entonces.” Dijo Nora.
“¡Tus ojos son diferentes!”
“No. Era lo mismo… Mi memoria es precisa.”
“¿Bueno? Entonces, ¿soy raro?” Preguntó Jeremy.
“No. En realidad yo también eh cambiado… Mierda.”
“Maldita sea, esto es muy discriminatorio. Después de todo, parece que también somos caballeros obsesionados con la *mundanalidad.”
*La mundanalidad en el corazón es nada menos que idolatría. Es intercambiar la verdad de Dios por una mentira y adorar y servir cosas creadas en lugar de al Creador.
“En adelante, ustedes serán *excomulgados.”
*La excomunión en síntesis es la pena impuesta por la Iglesia para la persona para que no pueda recibir la comunión. Los excomulgados son una categoría de delincuentes religiosos, son reos del delito de excomunión con la Iglesia, son pecadores de delitos considerados graves por la Iglesia.
La señora *Stella von Ighoeffer simplemente se quedó mirando fijamente mientras los dos temibles caballeros intercambiaban sonrisas de cálida amistad. Entonces, un caballero parecido a una pantera negra con una feroz mirada de ojos azules de repente lo miró y se sorprendió.
*Madre de Shuli.
“¡U-uh!”
“Oye, me duelen los oídos. Oye, tía, guíame rápido. No tenemos tiempo… Para ser sincero, dudo que haya testigos en este punto.”
* * *
“… Así que realmente entendí mal que lo sabías desde hace mucho tiempo, ja, pero incluso si solía ser, nunca te veo de esa manera… Realmente es.” Dijo la Emperatriz.
“También pensé que lo sabrías hasta cierto punto. Además, lo sepas o no, sería de mala educación mencionar una historia así... No, ¿cómo diablos se te ocurrió tal cosa?”
“Soy yo, soy yo, solo hablando de esta situación, entonces, ¿qué pasó...? No, ¿por qué estás enojado conmigo? Todo esto solo por esa mujer astuta, incluso si no tienes ni idea de eso…” Replicó la Emperatriz Elizabeth.
“¡¿Quién te crees que eres para llamarle de esa forma?! ¡¿Y por qué sigues sacando a relucir viejas historias del pasado?!” Respondió indignado el Duque Nuremberg.
“¿Una vieja historia? ¡No saben nada! ¿Es una vieja historia? En mi opinión, ¡todavía está bastante presente!” Dijo ella.
“¡¿No ha pasado ya suficiente tiempo de todas esas cosas?!”
‘¿Quién hubiera imaginado que los más fuertes del imperio estarían frente a ella encontrándose perplejos, sin saber qué hacer y producirían una imagen de ellos discutiendo entre sí?’
Nt7En cuanto a mí, solo estaba tratando de armar la historia que acababa de escuchar, manteniendo mi rostro rígido.
Para resumir el hecho de que la Emperatriz y el Duque de Nuremberg confiaron en una actitud tímida e inapropiada hacia la ex Emperatriz Ludovica y a mí, ella que murió y yo, nos parecíamos de una manera espeluznante.
En otras palabras, la ex Emperatriz fue el primer amor de mi difunto esposo, la mujer de la que nunca había escuchado su nombre correctamente durante toda su vida. Y mirando las reacciones de esos dos ahora, parece que la ex Emperatriz es incluso el viejo amor del Duque.
El Emperador, el Duque de Nuremberg y la mujer que entregó su corazón a mi difunto esposo es la ex Emperatriz.
Todos ellos pensaban que yo era su reencarnación…
‘Ja ja… Sabía muy bien que Johan se casó conmigo porque yo era completamente como alguien que fue su primer amor en él pasado, pero ni siquiera sé qué pensar o cómo sentirme cuando me encuentro con la realidad.’
Ahora comprendo por qué el Emperador y el Duque me parecieron extrañamente blandos hacía a mí todo el tiempo. Vagamente pensé que era porque era solo la esposa de un amigo preciado para ellos…
Sólo entonces comprendí por qué Elizabeth había sido una vez tan hostil conmigo.
“Basta…”
Cuando abrieron la boca en silencio, los dos, que no se veían diferentes a los cachorros de león en nuestra casa, inmediatamente dejaron de hablar y comenzaron a toser con torpeza.
Se escapó un suspiro.
Y dije: “Ahora todos los rompecabezas están armados. Ahora entiendo por qué todos me hicieron eso.”
“No, pero no creo que haya pasado mucho tiempo desde que te vi cómo eres. No sé cómo suena, pero en realidad, te he estado buscando desde el juicio hace tres años por eso mismo…” Respondió el Duque Nuremberg.
“Por supuesto, para ser honesta, puedo decir que hubo algo así, pero nunca te trate así premeditadamente…” Dijo la Emperatriz Elizabeth.
“Gracias a ambos por sus palabras, pero en realidad no importa.” Respondí.
‘Más excusas y excusas.’
Mientras disparaban tranquilamente a los dos hermanos, que estaban discutiendo con ellos, Elizabeth empezó a parpadear y el Duque tosió de nuevo con torpeza. Realmente es un paisaje digno de recordar.
No es que no se sintiera amargado por una situación así.
Por supuesto, mi sabor fue amargo al darme cuenta de que la hostilidad y el favor que otros me enviaban sin razón alguna era simplemente porque me parecía a otra persona. Además, no es una mujer noble cualquiera, es una ex Emperatriz, una persona fallecida…
‘Por otro lado, sin el favor del Emperador o del Duque, sobrevivir a las adversidades hubiera sido extremadamente difícil, ya sea antes o ahora. Si no fuera por esos dos, desde la primer audiencia me habrían privado de la oportunidad de dirigir la casa Neuschwanstein, y hubiera sido aún más difícil ahora que regresé. Puede que haya sido más difícil no solo para mí, sino también para los niños.’
Si lo pienso de ese modo retiro toda la carga puesta en aquellos pensamientos.
“¿Tus hijos saben de esto?”
Elizabeth asintió con la cabeza ante esta pregunta y el Duque negó con la cabeza.
“Si fueras un príncipe, definitivamente lo sabrías. Siempre puedo ver un retrato de tu madre biológica en el *claustro.”
*Claustro: Galería con columnas que rodea un jardín o patio interior.
‘Oh, *dijo que ni siquiera puede recordar el rostro de su madre.’ Después de todo, no había oportunidad de que supiera como es ella si no fuera por su pintura.
*Habla del Theobald, el príncipe heredero.
“Bueno, mi hijo probablemente no lo sepa. He prohibido esa historia aquí…”
“¿Hiciste tal cosa? ¿Por qué harías eso?”
“Es por mi esposa, pero no, ¿no sabías que incluso colgué un retrato de mi antiguo amor en la casa?”
“Pensé que iba a ser así, pero me sorprendió.”
“¡Hey *nonna!”
*Nonna: Nora siempre le llama Nonna a Shuli, es el equivalente a cuando una chica llama “oppa” a un chico, es como ‘Hermana Mayor’
Al final, Nora y Jeremy no lo saben, y Theobald lo sabe, por supuesto. No sé por qué Jeremy se siente extrañamente tranquilizado porque Nora no lo sabe. Sí, al menos mis hijos y Nora me ven solo a mí, pero ¿seguirían siendo amables conmigo? Eso me haría estar tranquila por lo menos…
‘Si la razón por la que Theobald afirmó que se había enamorado de mí el otro día fue simplemente porque me parecía a su madre biológica, me preguntaba por qué no lo hizo en el pasado. ¿Qué diablos hizo que Theobald actuara diferente en esta ocasión?’
También era cuestionable hasta qué punto estuvo involucrado con el cardenal Richelieu en el incidente anterior.
“Hmm, ah, oh, señora, la carta con aquellos dibujos que me dio en ese entonces. Solo quería darle las gracias por hacer eso.”
Estas fueron las palabras del Duque de acero, que se mostró un poco tímido y encendió la pipa mientras yo limpiaba diligentemente los pensamientos de mi complicada cabeza, y de repente sus ojos azules brillaron con seriedad.
Era algo que incluso yo había olvidado por un tiempo.
“Eso... Debes haberlo visto…”
“Sí. Estoy avergonzado... Puedo entender por qué me pidió verlo.”
Una luz ligeramente amarga y dulce atravesó los ojos azules que hablaban en voz baja. Y Elizabeth abrió mucho sus mismos ojos azules.
“¿Una carta y dibujos? ¿Qué es eso?”
“Incluso si no lo sabes... No podría explicártelo…”
“Si supiera un poco, ¿A quién se lo diría? ¿Cuántos secretos quieres ocultarme? No hay nada que pueda permanecer oculto ante mí querido hermano.” Dijo la Emperatriz.
“Es un abuso de poder.”
Teniendo en cuenta toda la serie de eventos y circunstancias, estaba claro que Theobald jugó un papel importante en el distanciamiento entre el Duque y Nora.
Y si mi intuición es correcta, tal vez el Príncipe Letrán también fue víctima de un completo malentendido ocasionado por Theobald.
Si el segundo príncipe es tan nervioso y egoísta como se conoce, no hay forma de que podamos llevarnos bien con él a excepción de nuestro Elías que tiene una naturaleza a fin.
Tal vez fue por algún malentendido que los dos pelearon antes de que regresará en esta ocasión.
*Suspiro*
Si la Emperatriz Ludovica hubiera estado viva, incontables castigos no serían suficientes para corregir los actos que el príncipe ha estado ocasionando.
Theobald es el sobrino del Duque de Nuremberg y el hijastro a quien la Emperatriz aprecia más que a su propio hijo. No hace mucho, era inconcebible que estas dos personas discutieran este tema. Pero ahora la situación y las circunstancias han cambiado. La caja del collar de diamantes podría malinterpretarse, por lo que incluso si se dejaba en suspenso por un tiempo, era suficiente hablar sobre el incidente de la casa de apuestas.
En este punto, el Duque de Nuremberg es un aliado de nuestra familia, y se trata del príncipe Letrán. Allí, fueron Jeremy y Nora quienes cerraron el caso.
‘¿Era realmente que ni la Emperatriz Elizabeth ni el Duque tenían dudas del proceder de Theobald? ¿Realmente no ha sentido ninguna molestia en el pasado? ¿Ni una sola una vez?’
... No, los verdaderos padres deben haber notado algo. Cualquiera sea la razón por la que cerró los ojos y se alejó.
Independientemente de cuáles fueran las verdaderas intenciones de Theobald, no se le podía permitir idear una obra maestra tan absurda. No podía esperar a ver algo más envuelto no solo en mí, sino también en mis hijos.
“¿Genial, señora?” El Duque me miró.
“Porque… Oh, así que no es así en este momento, así que relájate. De todos modos, ella ha fallecido y tú eres una persona completamente diferente.”
“Emperatriz madre, ¿sabes sobre qué tipo de pasatiempos disfrutó el príncipe Letrán recientemente?” Pregunté.
Dos pares de ojos azules se iluminaron uno al lado del otro con una luz deslumbrante.
* * *
“¿Es mejor tener una sirvienta más joven para servir a un hombre guapo?”
“¿Por qué un chico apuesto lo necesitaría de cualquier forma?”
“Creo que será posible escuchar una historia más veraz que obligarlos a hablar por miedo.”
“A pesar de que estamos buscando a alguien que podría haber estado aquí ese día hace cinco años, ¿verdad?”
“¡Correcto…!”
Mientras Jeremy negaba con la cabeza y le acariciaba la frente con la palma de la mano, Nora miraba la tarea simplista que tenía delante sin mostrar ningún signo de lástima. En otras palabras, no tienen nada que objetar a la suposición de que son capaces de ser guapos.
En cualquier caso, comparado con las residencias del Emperador, como se trataba de un trabajo propio en un pueblo, era muy sencillo y poco elegante. A pesar de la apariencia, la sensación general en sí era desordenada y sombría. Es difícil creer que Shuli nació y se crió en un lugar como este.
“No, pero ¿qué diablos está haciendo el dueño de esta casa? Mi esposa y mi hijo ni siquiera muestran sus narices mientras hacen ese show en vivo en la capital.”
“Estoy bastante loco por los juegos de azar, así que no me importa lo que le pase a la casa. Vale la pena saberlo.”
“Quiero que te quedes aquí un rato hoy. Creo que es la mejor opción…”
“Oye, ¿quiénes son los jóvenes?”
Era una pregunta cuidadosamente planteada por una mujer rechoncha de mediana edad con traje de sirvienta, que se acercaba a la puerta principal, como si no fuera raro ver a dos caballeros con apariencias inusuales intercambiados amistosamente. Jeremy no le prestó mucha atención, a pesar de que fue interrumpido, y respondió de inmediato.
“Del marqués de Neuschwanstein, ¿estas al servicio del vizconde Ighoffer?”
En esta breve auto-presentación, la doncella de mediana edad quiso parpadear los ojos por un momento, luego mostró una expresión que decía que probablemente se convertiría en un estigma o algo como eso.
“¿Sí? Neuschwanstein... Entonces, ¿eres de la casa de la Sra. Shuli?”
“Para resumirlo a grandes rasgos, así es, pero ¿qué pasa contigo, qué puedes decirnos al respecto?”
“Nuestra Noona no está aquí ahora. ¿La conocías?”
Jeremy y Nora intercambiaron una mirada por un momento, luego preguntaron al mismo tiempo.
“¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí?”
“¿De qué estás hablando? Han pasado 15 años, pero ¿por qué? ... ?”
“Si son 15 años, debo haberla visto desde que era bastante joven.”
El salón de la escritura del propio autor era estrecho pero con una decoración bastante ornamentada, pero en lugar de elegante o anticuado, parecía más como si se pusieran de moda adornos costosos que no estaban en armonía.
Nora se sentó tranquilamente y respondió a la pregunta de la solterona mientras Jeremy miraba fijamente a la majestuosa miniatura que ni siquiera se parecía a la cosa real que colgaba alta de la pared.
Por alguna razón, Jeremy debería haber asumido ese papel, pero por alguna razón el joven león estaba manteniendo un silencio ambiguo desde el momento en que ingresó a la mansión.
“Así es. Desde que tenía cuatro años, hasta que se casó, la he estado sirviendo. Eso… ¿Realmente la señora se encuentra bien?”
Nora apoyó el brazo en el respaldo de la silla por un momento y miró de cerca el rostro de la criada.
Tiene una buena impresión y sus ojos son claros y limpios. Parecía lejos del tipo de halagos torpes o balbuceos.
“Veo que lo estás haciendo bien. Pareces un poco cercana a ella si preguntas tanto por ella.”
“No. No puedo decir demasiado, tampoco es que haya sido de tanta ayuda para la joven señora…” Respondió la criada.
“¿Ayuda?” Nora preguntó con interés.
“Eso… No tuvo una vida muy feliz aquí... Yo también le tenía miedo a la señora, así que no podía ser de mucho consuelo para la niña…”
Una luz amarga pasó por el rostro arrugado de la doncella mientras hablaba en voz baja y bajaba la cabeza. Esto podría verse como una reacción muy honesta.
“¿Has estado aquí desde que se casó con el marqués?”
“Solo he estado allí una vez, pero…”
“¿Cuando fue eso?”
Era una pregunta que Jeremy, que se la estaba pasando a su amigo el interrogatorio con la boca cerrada, se inclinó abruptamente hacia adelante y gruñó. Ante esta fuerza bastante violenta, la criada de mediana edad parpadeó como si estuviera asustada por un momento, luego tartamudeó en respuesta.
“Eso fue, quiero decir, probablemente fue el invierno hace cinco años. Así es, fue al cumplir el primer año de su matrimonio…”
“¿Hace 5 años?”
“Sí, fue capaz de llegar a través de la intensa nieve casi al amanecer. Recuerdo que todos se sorprendieron porque llegó aquí sin dar un aviso previo…”
El rostro de Jeremy comenzó a endurecerse poco a poco. Nora miró la expresión de su amigo en silencio y luego volvió a hacer la pregunta.
“¿Recuerdas cómo era el marqués en ese entonces?”
La expresión de la criada del ama de llaves se estaba volviendo cada vez más perpleja y sin saber qué hacer. En lugar de intentar ocultar algo, parecía que era difícil decir la verdad.
“Si intentas ocultar algo o decir una mentira en este lugar, no podrás ver el amanecer mañana por la mañana. Por favor, dígame exactamente cómo estuvo el marqués ese día y por qué ella vino aquí de repente…”
“Uh, ¿Por qué le mentiría? Es solo... El estado de la joven señora ese día no era muy bueno…”
“¿Qué significa eso?” La voz de Nora era bastante tranquila, pero había una sensación de intimidación que era difícil de describir.
La criada quiso mirar alternativamente a los dos caballeros con ojos ansiosos por un momento, pero después de un rato, se veía aún más determinada y desesperada, y continuó la conversación.
“¿Cómo alguien como yo puede saber los detalles de los asuntos privados de sus amos?, pero mi joven señora que de repente nos visitó esa mañana parecía estar aterrorizada. Y estaba llorando, eso lo recuerdo claramente…”
“¿Estaba llorando…?”
“Sí. Después de despertarse de su sueño, se aferró a la *señora y le rogo en repetidas ocasiones para que no la hiciera volver. Había mucho alboroto, todos nos preguntábamos que demonios estaba pasando, ya que la joven señora parecía fuera de sí. Nunca había visto a una dama así antes, así que todos estaban confundidos. Incluso cuando se decidió la fecha de la boda, ni siquiera entonces hizo un escenario como ese…”
*Madre de Shuli.
“……..”
“No escuché los detalles de eso, pero recuerdo que el maestro estaba enojado en ese momento, dijo que estaba loca y le ordenó que regresara de inmediato. El tiempo era esencial y precioso para hacerla volver, así que tomamos a la joven señora que estaba exhausta, le quitamos la ropa y la metimos a la bañera para prepararla…”
Jeremy permaneció inmóvil, mirando la boca de la criada. Casi no podía respirar. Por otro lado, Nora, que mantenía un ambiente más tranquilo, volvió a preguntar lentamente: “¿Es eso así?”
“… Lo siento. ¿Cómo vas a aceptar las palabras de una criada como yo…?”
“Sigue diciéndonos todo lo que sepas, lo aceptaremos tal y como es. ¿Estaba lastimada?”
Ante estas palabras, sus ojos marrón oscuro se abrieron como si supiera cómo.
“Sí. Eso... No sé cómo sucedió, pero tenía cicatrices alrededor del cuello, *verdugones muy visibles, sus pantorrillas estaban magulladas y tenía carne reventada en algunos lugares. Podría decir con certeza que recibió una paliza. La oí decirle a los señores que fue el Marques, y recuerdo que me asombró mucho saber que un hombre así sería capaz de hacer tal cosa…”
* Los verdugos son moretones más intensos, se presentan al recibir golpes muy fuertes
A diferencia de los moretones estos hacen sensible a la piel hasta casi reventarla.
“……….”
“Tan pronto como amaneció, temprano en la mañana vino gente al servicio del marques y se la llevaron, y así se terminó el incidente de ese día. A pesar del alboroto de la noche anterior, la joven señora obedeció sin pestañear como si nada hubiera pasado, inexpresiva como una muñeca. Ese fue el último día que vi a la joven señora.”
* * *
El paisaje de los campos de *juncos teñidos en el crepúsculo rosado con el sol poniente parecía pacífico y cálido. Un viento fresco del este sopló y les revolvió el pelo. Los caballos que pastaban tranquilamente inclinaron la cabeza y miraron a sus dueños.
*Planta herbácea silvestre de muchos tallos rectos, largos, flexibles y cilíndricos, hojas reducidas a una lengüeta larga y delgada, flores agrupadas en cabezuelas casi terminales y fruto en cápsula.
“... Después de todo, no era mentira. La sirvienta de antes y los otros empleados, sus versiones coinciden.”
“……”
“¿Es así como es? ¿No lo crees tú también? Di algo…”
“……..”
“Entonces estás diciendo que es cierto que Shuli regresó aquí hace cinco años. Ella vino llorando y pidiendo ayuda… ¿Quién, ha, es cierto quien la golpeo? ¿Podría haber sido él? ¿Quién más que uno puede hacer eso? ¿Eh?”
“…….”
“¡¡¡MALDITA SEA, REALMENTE LO HIZO!!!”
Un gran grito, resonó a través de los ondulantes campos de juncos.
Jeremy se dejó caer en el suelo exuberante y se envolvió la cabeza con las manos, mientras Nora miraba con los ojos en blanco. Lágrimas incontrolables fluyeron de sus distorsionados ojos verde oscuro mientras sus hombros caídos temblaban violentamente.
“Todo... Todo es verdad... Vino aquí hasta aquí, caminando con ese clima inclemente, temblando. Lloró y dijo que no quería volver…”
“……..”
“Sabes, mi padre nunca nos puso una mano encima. Ninguno de nosotros ha sido jamás golpeado por ninguno de nuestros padres de esa manera. Pero entonces, ¿Por qué diablos hizo eso? Mi padre siempre estuvo cerca de Shuli todo el tiempo. Tanto que nosotros estábamos celosos. Por cierto... aghh, pero entonces, ¿cuál es la diferencia entre una mascota y ella que era tratada de esa forma?”
“Jeremy.”
“¿Cuál es la diferencia entre mi padre y la familia de ese escritor? ¿Qué es lo que lo hace diferente a ellos? Qué horrible debe haber sido, ¿Sera por ello que ni siquiera lo recuerda? Quizás eso no sea todo... Entonces yo, ¿Qué diablos podría hacer yo por ella…?”
Nora no dijo nada.
‘¿Qué podría decir en esta situación?’
Él se arrodilló en el suelo y silenciosamente puso su mano sobre el hombro de su amigo que estaba llorando. Sus ojos azules también estaban hundidos con una luz compleja.
El cielo ahora estaba todo púrpura. Era hora de retroceder lentamente.
Nora miró a su amigo que no podía dejar de llorar por un momento, luego se levantó y se acercó al carruaje estacionado detrás de la ladera. Tan pronto como se abrió la puerta, la vizcondeza, que había estado atada a su asiento y gimiendo, gimió horrorizada. Parecía que estaba a punto de gritar, pero estaba amordazada, por lo que el único sonido era un gemido.
“Gracias por la información. Pero la señora Ighoeffer…”
“… ¡Eup, eup eup...!”
“¿Dijiste que ni siquiera viste el rostro del sacerdote que se te acercó y no sabías exactamente quién era?”
“¡Eup, Eup…!”
La dama que estaba luchando desesperadamente sacudió la cabeza de arriba a abajo con todas sus fuerzas. En lugar de una boca vendada, Nora miró directamente a los ojos muy abiertos, que se veían exactamente como los de otra persona, una que él apreciaba, y al mismo tiempo ojos verdes muy diferentes, y exhaló con una voz tan fría que provocaba escalofríos.
“Entonces lo siento, pero tienes que morir ahora.”
* * *
Llegó a casa justo a tiempo para cenar. Después de pasar medio día en la residencia del marqués Neuschwanstein, el príncipe Letrán, que claramente parecía estar jugando, estaba a punto de regresar al Palacio Imperial.
“¡Buenas noches, Lady Neuschwanstein!”
“Señora, permítame tomar su mano un momento. ¿Nos disculparía por estar tarde…?”
Letrán y Elías, que se saludaron frotándose los antebrazos uno al lado del otro sin importar lo que hubieran estado haciendo durante todo el día, exuda una atmósfera de profunda amistad, como si hubieran renunciado a sus vidas pasadas.
Y sonreí, sintiendo un poco de pena por Letrán.
“Hola, mi príncipe. ¿Por qué no se queda a cenar con nosotros…?”
“No. Mi madre probablemente me este esperando, así que si me disculpa, será la próxima vez. ¿Eso está bien señora?”
Entendía perfectamente lo que quería decir. Ver al segundo príncipe, al que le costaba trabajo hablar o expresar sus pensamientos, con esa voz tan ronca, debido a la *sinusitis, hace que mi corazón se sienta pesado por alguna razón.
*Sinusitis: Inflamación de los senos del cráneo situados en la frente sobre los dos lados de la nariz, que es debida a una infección de las fosas nasales o de los alvéolos dentarios; suele producir obstrucción nasal y dolor de cabeza.
Después de todo, todo ha terminado, así que Elizabeth no le dará a este príncipe brillante un poco de atención tardía, ¿verdad?
Ni Elizabeth ni el Duque de Nuremberg habían estado callados durante tanto tiempo, con rostros sus rostros cansados mientras el Duque me miraba a través de sus anteojos, cuando les conté la historia completa del incidente anterior de la casa de apuestas, parecían estar impactados. Me preguntaba si estarían indignado si estuviera tratando de incriminar al Príncipe Heredero, pero si era porque estaban demasiado sorprendidos o porque reproche sus acciones como padres, solo pregunté si podían darle un poco más de atención al príncipe, era preocupante aún más después de la situación con la casa de juego. Les pedí que lo tomarán más en consideración antes de que fuera más tarde.
* * *
Después del juicio, mi madre desapareció y apenas pude encontrar rastros de mi hermano, por lo que ordené a algunos caballeros de élite de la familia que los buscaran. No solo esos dos, sino también mi padre, que no sé lo que están haciendo en este momento. Tuve que averiguar si la gente de mi familia seguía convirtiéndose en una trampa para mí de esta manera, y luego tuve que tomar medidas para evitar que esto volviera a suceder.
De todos modos, debe haber sido bastante complicado a estas alturas. Elizabeth y el Duque. Depende totalmente de ellos decidir a qué conclusión llegarán mientras reflexionan sobre la historia que les conté hoy.
Con ese pensamiento, aparté los ojos del príncipe Letrán y lo miré, que era tan similar a mi segundo hijo en este momento.
“¿Dónde está tu hermano?”
Fue una pregunta irreflexiva, pero, sin duda, Elías habló como si lo supiera.
“¿Cómo sabría eso? ¿Por qué siempre estás buscando mi hermano mayor? ¡Ja, oh, oh, oh, oh, oh, oh, estoy asombrado!”
“¿Cuándo lo hice? ¿Estás celoso de nuevo? Oh, ¿estás triste por eso?” Pregunté.
“¡Caramba, ¿quién está celoso?! ¡¿Por qué me tratas como un niño?!”
“¡Porque actúas como un niño, te trató como a un niño por eso mismo!”
“¡Guau! ¡Discriminación infantil! Su Alteza Letrán, ¡así es como vivo!” Se quejó Elías.
“Maldita sea, por lo que puedo entender, lo lamento por ti. Supongo que se supone que a las madres solo les gusta el hijo mayor.”
“¿Qué, incluso si no les dieron a luz?”
‘¡Dar a luz!’
Estaba negando con la cabeza y me dirigí directamente a la casa para cambiarme de ropa, cuando Robert vino a verme. Nuestro leal mayordomo dijo con una pupila temblorosa: “Señora, tiene una visita.”
“¿Ahora…? ¿Quién podría ser esta vez?”
“Eso… es el cardenal Richelieu.”
Mi mano que estaba quitando el broche de *peridoto se detuvo de inmediato.
*Peridoto: Es un olivino con calidad de gema; tiene una gran cantidad de magnesio en su estructura y posee un brillo vítreo, el peridoto es una de las pocas piedras preciosas encontradas en un solo color. Son comúnmente confundidos con las esmeraldas pese a poseer un tono más amarillento.
‘¿Quién dijo que estaba esperando justo ahora…?’
* * *
“¿Estás bien?”
No sé si la pregunta está dirigida a los caballos que están en cuclillas en el suelo y que luchan con la espuma en su boca, o al amigo que mira hacia el cielo estrellado con los ojos húmedos y parece que va a sacar incluso una sola melodía de mala suerte.
Tenía una expresión complicada. Así que Jeremy decidió interpretarlo a su manera.
“No. Es tan miserable que quiero cavar en el suelo y morir.”
“Aún así, me alegro de que no esté tan sencillo como antes. No tengo pasatiempos para calmar a un bastardo como este…”
“Realmente no quiero llorar en los brazos de un bastardo de ojos oscuros.”
Nora podía comprender el sentimiento de ira y decepción por sus padres, a quienes creía perfectos, mejores que nadie, pero la conmoción y el desaliento que Jeremy estaba sintiendo en ese momento era de un tipo que era difícil de juzgar.
Así que Nora no dijo más y volvió la mirada hacia el hermoso cielo nocturno. Sorprendentemente, Jeremy fue quien volvió a abrir la boca.
“Mi hermana me hizo hacerle una promesa.”
“¿Qué?”
“-Promete que te desharás de todos aquellos que intimiden a nuestra madre-. Prometí que lo haría. Por cierto… Pero si uno de ellos es nuestro padre fallecido, entonces yo… ¿Qué diablos se supone que debo hacer?”
Fue bastante lamentable para Jeremy, que tanteaba con ojos ansiosos como un niño que ha perdido el camino a casa, ya que su habitual confianza y alegría se habían desvanecido. Ver a un caballero de sangre caliente tan feroz frotándose los ojos con los puños como un niño, sin importar cuán frío sea, en este punto, su corazón helado se derretiría y fluiría.
Entonces Nora abrió la boca lentamente, mirando a su amigo con una expresión comprensiva en el rostro.
“Estás haciendo esto a propósito.”
“... ¿Qué mierdas dices…? ¿Sabes cómo me siento ahora mismo?” Replicó Jeremy.
“Incluso si no lo sé todo, puedo entenderlo hasta cierto punto, pero más que eso, parece que tú, bastardo, estás ejecutando una táctica que induce a la simpatía para persuadirme en secreto de que pida ayuda a nuestra noona y ella simpatice contigo como si fueras un bebé, ¿verdad?”
Jeremy no afirmó ni negó.
Como si no entendiera del todo lo que estaba diciendo, sus ojos verde oscuro que lloraban en lágrimas eran patéticos, y solo miraba fijamente a su amigo.
Finalmente, un clic agudo salió de la boca de Nora.
“Maldita sea, lo tengo. Ahora que conoces la verdadera naturaleza de tu padre, es mi turno. No tienes que morir ni decírselos, tienes que intentar de enmendar el error, aunque aún queda un asunto que resolver, el collar...”
“¿Qué? Pero tu… sabes que eso sería muy difícil.”
“¿Hay algo mal? Tendré que presionarlo de alguna manera. ¿Está su collar en casa?”
“No, lo tengo ahora. Entonces, vayamos rápido.”
Nora decidió no decir nada ante la acción de Jeremy como si hubiera estado esperando. En cambio, se volvió furioso hacia los caballos jadeantes, gimiendo como dientes. Jeremy lo siguió como un gatito cariñoso.
* * *
‘Cuando tengo la cabeza complicada, desesperadamente quiero beber.’
No era el tipo de persona que disfrutaba mucho de la bebida, pero estaba desesperado por recibir ayuda para evitar la embriaguez en momentos como este. Pero, irónicamente, hoy no sentí el sabor del alcohol.
“*Suspiro…*”
Theobald dejó su bebida y levantó la mano para presionar suavemente su sien. Cuando una sonrisa autosuficiente apareció en sus labios, sus ojos dorados cayeron.
En momentos como este, se veía exactamente como la mujer del retrato opuesto a ese pasillo. Si hubiera nacido como una princesa a la que le quitaron su madre biológica del retrato, su padre podría haberse convertido en el hombre más poderoso del imperio a estas alturas. La irónica realidad de nacer como un hijo que sólo se asemeja a la apariencia cuando muere una hierba o cuando está triste es buena suerte y mala suerte si es mala suerte.
En cualquier caso, Theobald se encontraba ahora en un estado muy lúgubre y desolado. Sin embargo, parece que su plan ha ido mal últimamente. Como si alguien interrumpiera deliberadamente todas y cada una de sus acciones…
Su plan de usar a su medio hermano idiota y su inquietante pandilla más joven para romper el aliento de los aristócratas y al mismo tiempo abrir una brecha entre los hijos de Neuschwanstein y Shuli y fracasó cuando el casino se evaporó repentinamente de la noche a la mañana.
La pequeña obra de Ighoeffer, que había encontrado y colocado en el asiento del jugador e instigador principal en este asunto, también había desaparecido sin dejar rastro. No importa cuánto trató de desentrañar a todos los miembros de la noche, no pudo encontrar a uno solo, parecía que se los había tragado la tierra.
Realmente fue una coincidencia que notó el movimiento inusual que sintió la iglesia durante este festival de verano. En el proceso de localizar al joven señorito de Ighoeffer, le ordenó que averiguara el paradero del vizconde, por si acaso, pero por alguna razón, escuchó un informe de que la iglesia parecía haberlo solicitado y se encontraba desaparecido.
En el camino, Theobald fue con algunos sacerdotes con los que había entablado amistades y habló en secreto sobre ellos.
Con la excepción del joven cardenal de élite “el silencioso”*, que apenas sabe lo que está pensando, fue fácil para un hombre como Theobald arrojar luz sobre las pistas de los clérigos cansados del mundo común. No parecían saber nada en detalle, pero las pistas como un evento por primera vez en 70 años o un incesto en la casa de los leones fueron suficientes eventos para ellos como para ordenar un juicio santo.
*Silencioso o el silencio, es el apodo por el cual nombran al cardenal Richelieu.
En cierto modo, fue una buena oportunidad. Todavía no era capaz de entrometerse o inmiscuirse en los asuntos de la autoridad eclesiástica, pero pudo planificarlo de modo que fuera enteramente para su propio beneficio en su destreza.
¿Podría haber alguna otra manera más segura de ganarse el corazón de la marquesa que aparecer como el único salvador cuando todos comenzaran a correr y atacarse unos a otros como una jauría de perros?
Es por eso que le envió un collar por adelantado que no era más que una muestra del interés que el mostraba en ella…
“... Mierda.”
Una palabrota inapropiada salió de la nada. No fue otro que su primo y casi hermano quien se benefició de este incidente.
Sí, ese primo, el príncipe Nuremberg, que había sido engañado por él desde la infancia.
Realmente nunca imaginó que se llamaría a sí mismo el caballero de honor de la marquesa Neuschwanstein. ¿Quién lo hubiera imaginado?
Con suerte, ese chico también hubiera sido eliminado en ese momento, pero los acontecimientos no ocurrieron de ese modo.
Un quejido escapó de la boca del hermoso joven que frunció el ceño.
“… ¿Son estos padres quien realmente sienten algo especial por sus hijos?
Ese fue un gran lamento de autoayuda.
De todos modos, cuando le echó un vistazo a su estúpido medio hermano dijo que no jugaba en estos días, Letrán simplemente puso los ojos en blanco y dijo que estaba harto.
¿Fue esa la única razón por la que renunció? En cualquier caso, ¿es realmente una coincidencia que su cómplice, el joven Ighoeffer desapareciera de este modo?
Para empeorar las cosas, en estos días Letrán ha mostrado un lado extraño de seguir a
Nora como nunca antes. Si Nora estaba involucrado en el problema de la casa de juego...
Si es así, ¿También fue él quien se encargó del joven Ighoeffer?
Después de pensar hasta ese momento, Theobald se levantó de inmediato y salió del pasillo. No hubo más tiempo que perder. Tenía que arreglarlo de inmediato. Sería más conveniente resolver este asunto de forma eficaz que demorar en pensar en otros planes. Es inaceptable que un cachorro de lobo, que ha estado separado de la manada durante mucho tiempo, sea tomado en serio después de tanto tiempo.
La residencia del Duque de Nuremberg fue un recuerdo de la infancia de Theobald. En todas partes de la pintoresca y gigantesca mansión, había rastros de una infancia jugando con un primo de tres años. Theobald entonces era muy pequeño y joven en comparación con ahora, y Nora era más joven.
Recordaba la primera vez que vio a su primo.
Cuando la Duquesa, que era mucho más joven que ahora, visitó el palacio de la Emperatriz con el joven Duque, que solo tenía tres años. Incluso entonces, Theobald no sentía más que curiosidad por su primo pequeño.
Más tarde, cuando visito la residencia de este Duque una noche, vio a un joven de ojos azules centelleantes salir corriendo de la casa el mismo día que había visitado a su estimado tío. El Duque, que sostuvo al niño con un brazo y sonrió alegremente como si estuviera sosteniendo su mundo, fue inesperado.
Fue una escena desagradable.
Era algo que nunca había imaginado ver una relación tan afectuosa entre los nobles.
Quizás a partir de entonces...
“Ah, ha pasado un tiempo desde que estuvo aquí, Su Alteza. ¿Cenaste?”
A pesar de la repentina visita a una hora bastante tardía, Theobald sonrió y trató de deshacerse de su desorden al ver al Duque que le dio la bienvenida como de costumbre.
‘En cualquier caso, nunca volveré a ver el desagradable escenario de esa época.’
Theobald bebe lentamente el té que le había traído el sirviente mientras el Duque, que había llevado directamente al príncipe a la sala, se sentó tranquilamente en el sofá y midió la pipa. A medida que la intoxicación tardía golpea ligeramente y se eleva, una sensación placentera y somnolienta se extiende por todo el cuerpo.
“Pido disculpas por llegar tarde.”
“Realmente no importa, pero ¿sucedió algo? Tienes mala tez.”
Theobald sonrió en silencio, luego inclinó la cabeza por un momento, mirando fijamente la taza de té con el laurel en ella. Era natural que los ojos azules del Duque parpadearan con curiosidad ante esta apariencia bastante desolada.
“¿Su Alteza? ¿Tiene alguna inquietud?”
“... Bueno, no sé cómo suena, pero en realidad estoy en serios problemas. Vine aquí preguntándome si podría pedirle ayuda a mi tío…”
“Dígame. ¿Qué diablos está pasando?”
El Duque de Acero estaba persiguiéndolo en un tono relajado como de costumbre, por lo que Theobald naturalmente bajó la mirada, levantó la mirada y abrió la boca con vacilación.
“Yo... Lo que comenzó tontamente con buenas intenciones parece haberse convertido en un giro desafortunado…”
“¿Empezó con buenas intenciones?”
“Sí, en realidad yo…”
“¡Alteza!”
“……”
“¡Mi señor buenas noches!”
Fue entonces cuando Theobald, que había continuado hablando en voz baja, se detuvo de repente. Para ser más precisos, la voz del mayordomo de esta mansión resonaba con urgencia, y luego una voz que había escuchado mucho en alguna parte sonó fuerte.
En el mismo momento en que las dos personas que habían sido interrumpidas inesperadamente por su conversación levantaron la cabeza con asombro, la puerta del salón se abrió y un alto caballero rubio que no tenía idea de por qué salía y un caballero de cabello negro que era el sucesor de esta familia entró.
“Duque, lamentamos la demora…”
No hace falta decir que el rostro de Jeremy, que lo había recibido con genuina sinceridad, se congeló inmediatamente en un instante. Lo mismo le sucedió a Nora, que lo siguió en silencio con la boca cerrada.
No, ese estaba mucho más brutalmente congelado.
El silencio pasó por un momento. Un Duque de mediana edad dejó tranquilamente su pipa y se cruzó de brazos mientras dos jóvenes de pie frente a un joven sentado en una silla en la sala estaban enfrascados en una inesperada pelea verbal.
* * *
No es que no pensara que podrían malinterpretarme, ya que es solo una enfermedad cardíaca. Después de todo, su mirada silenciosa no me hizo daño en el pasado.
Sin embargo, ya es una versión muy diferente del pasado, y venir aquí por mis propios pies, ¿no es una prueba de que hay un plan?
El cardenal Richelieu, que había venido de visita en un momento inusual, mientras yo tenía esos pensamientos y mantenía mi rostro inexpresivo, también se sentó en silencio, con sus ojos negros hacia abajo, sin tocar la taza de té que tenía frente a él. El brillante cabello castaño oscuro que le caía por la frente era un marcado contraste con la figura parecida a un cuervo enterrada profundamente en su uniforme negro.
“Su Alteza una vez me contó una anécdota sobre el salón del cisne.”
Era frustrante que rara vez abría la boca al tema que venía con sus pies, así que cuando finalmente habló, una mirada negro azabache me miró directamente a la cara. Una risa se escapó.
“No sé si eso fue una advertencia o algo así, pero tengo que rendir homenaje a las habilidades de su gracia. Fue una broma tan tonta que hizo que la denominación llevara a cabo un juicio divino después de 70 años. Me gustaría preguntarte una cosa, pero ¿qué parte de mí le disgusta tanto su gracia? ¿Qué querías lograr al hacerlo? Si estaba apuntando a una nueva *hegemonía o los activos de Neuschwanstein al hacerlo, desafortunadamente, tiene exactamente el resultado opuesto. No importa cuán profundamente arraigado haya en la fundación de este país…”
*Hegemonía se refiere a la dirección suprema, la preeminencia o el predominio de una cosa sobre otra. En este sentido, la supremacía de un pueblo sobre otros, o, dicho de otro modo, la superioridad que un país tiene sobre los demás, convertirá a esta nación en un Estado hegemónico.
“Mientras corten algunos de los fondos que fluyen hacia el distrito escolar, no me importa. Después de todo, son placeres inmundos con esos activos, así que prefiero decir que salió bien.”
‘¿Eh? Debo decir que esto es un poco sorprendente. Es raro que un sacerdote haga un comentario tan comprensivo como ese.’
“No creo que eso sea lo que diría la persona que está ganando poder en medio de tal multitud. ¿Estás diciendo que es la única excepción?”
“No tengo vergüenza más que ante la presencia del Padre y de la Santísima Madre.”
El cardenal, que respondió lenta y vigorosamente, me miró con ojos que parecían arder por alguna razón.
‘¿Dices que todo esto se debe al evangelismo? Yo soy la que debería estar enojada, pero el parecía estar más enojado incluso ahora.’
“No tiene ni un solo poco de vergüenza.”
“Como sacerdote que sirve a Dios, nunca he roto ninguna doctrina o pacto. No hay ninguna razón para que alguien como usted sea capaz de criticar mis acciones... ¿Acaso usted no es cómo yo, un simple humano capaz de cometer errores?”
“…….”
“Le pregunté, ¿qué parte de mi lo tiene tan insatisfecho?”
“Tú misma existencia es como un juicio severo para mí. ¿Sabes cuántas personas han caído en pecado solo por tu culpa?”
“¿Qué…?”
“Traté de sacarte del mundo para que nadie más pudiera verte. Pero, como siempre, todo te ha salido bien. Para poseer a los mejores hombres del imperio, ganar el aprecio y cuidado de tus hijastros, puedes creer que te saliste con la tuya, pero no puedes escapar de los ojos del juicio divino para siempre.”
Sentí mi barbilla caer al escuchar aquellas palabras. Debido a que era una crítica que no podía haber imaginado, fue más vergonzoso que ninguna herida que sufrí incluso en el pasado.
El joven cardenal, que había pronunciado un lenguaje tan abusivo con la gente frente a mí, ahora me miraba como si estuviera a punto de devorarme, con los ojos ardiendo como pozos de oscuridad. Podía ver la aparición de venas pálidas que se elevaban de una mano que estaba colocada sobre la mesa.
Una sonrisa se filtró de la nada.
“Parece que te olvidaste de qué lado ganó el duelo de honor que Dios le dio a la decisión final.” Respondí.
“Es solo un truco del diablo.”
“Entonces soy verdaderamente un sirviente del diablo. Para usted su gracia, ¿la relación entre todos en el mundo es así? ¿No ves nada más que una *iniquidad extrema o una inocencia extrema?”
*Iniquidad: Injusticia o gran maldad en el modo de obrar.
“El hombre es por naturaleza un necio nacido que está manchado por el pecado original. Especialmente para los hombres que son propensos a sucumbir a la lujuria, la combinación de encantos diabólicos como el tuyo no puede evitar enamorarse de cualquier hombre. Ni siquiera parece saber quién es un pecador. Hay un cielo para el diablo en este país, donde el diablo vaga tanto como el infierno. Igual que tú...”
“No sé de quién es el alma que he perdido, pero ¿no es el cielo para el diablo la denominación misma de la que estás hablando? ¿Me ve como una viuda lamentable más peligrosa que el clero que regularmente cambia de gobierno y engendra hijos ilegítimos? Si su gracia es realmente una persona tan impecable, me pregunto cómo no pudo encontrar realmente mis errores…”
“Por supuesto que creo que está mal. Como la autoridad de la enseñanza ha caído hasta este punto, las personas son más susceptibles al pecado que en el pasado. Tus verdaderos enemigos no somos nosotros, sino tú misma y este mundo, lo que te hace pecar constantemente.” Respondió el cardenal Richelieu.
“………”
“A veces me siento como un loco por tu lástima, pero siento lástima por mí mismo, que sufro una agonía infernal a causa de seres como tú. Por ti mi cuerpo puede ser puro, pero mi alma está contaminada desde hace mucho tiempo. Entonces, incluso por el bien de todos, sería mejor que dejarás todo aquí y abandonarás este mundo. Podría ayudarte a hacerlo…”
... Me pregunto si la persona sentada frente a mí en este momento es *“el silencio” que siempre he conocido y respetado. Aparte del hecho de que es una persona reticente que rara vez habla más de dos palabras, nadie se hubiera imaginado que fuera capaz de derramar palabras de manera tan violenta haciendo fluir sus emociones hirvientes de ese modo.
*El silencio o silencioso, es el apodo del cardenal Richelieu.
Mientras estaba paralizada hasta el punto en que mis ojos casi se saltan, el joven sacerdote me daba una mirada significativa, sin mostrar ningún signo de dificultad para respirar.
La ira y la angustia que destellaron en sus ojos negros de ébano, y la luz que parecía anhelar algo, lentamente, muy lentamente, enfriaron toda mi columna vertebral. Al momento siguiente, una mano helada agarró mi mano que había sido colocada casualmente al lado de la taza de té, la sacudí y me levanté.
“¿Crees que no sé lo que está pensando su gracia en este momento?”
“……..”
“¿Ese es su propósito? ¿Qué ibas a hacer conmigo? ¿Encerrarme en un convento? Cuando preguntará esto realmente esperabas una respuesta positiva, ¿fue eso lo que realmente planeo? ¿Alguna vez has visto a un ser humano ser tan horriblemente lamentable? Esa arrogancia ignorante de creer que está por encima de todos los demás en el mundo. Si cree que tal cosa funcionará, está muy equivocado. ¡Preferiría morir en el fuego del infierno que pertenecer a un hombre como tú!”
Cuando salió de mi boca aquel tono de desprecio, el cuerpo del joven cardenal se estremeció por un momento, pero luego recuperó su expresión fría y espeluznante.
“No hay una o dos personas que te persigan. Es sólo cuestión de tiempo antes de que te quite todo lo que tienes, siempre y cuando continúes por donde vas, serás una perfecta adversaria.”
“Queda por ver quién será el perdedor. Ir en contra de Neuschwanstein Y Nuremberg nunca será fácil. Si eres un siervo de Dios y tienes la mínima intención de volver a lastimar a mis hijos una vez más, me aseguraré de hacerles pagar el precio.”
Le di fuerza a ‘Mis Hijos’ y lo escupí, pero su boca estaba distorsionada como si estuviera escupiendo veneno puro.
“Afirmas que realmente sientes la maternidad extrema hacia aquellos que llamas tus ‘hijos’.”
“Realmente no me importa lo que piense una persona como usted.”
“Una mujer como tú…”
“¡¿Qué cosas dice?!”
Lo que sea que el cardenal Richelieu estaba a punto de decir a continuación, fue interrumpido por el león rojo, que de repente se estrelló contra la puerta del salón y rugió directamente con una furia ardiente.
Elías comenzó a derramar una declaración de guerra verdaderamente imprudente contra el Cardenal, como si hubiera estado esperando este momento sin ninguna posibilidad de detenerle.
“¡¿Con qué tipo de seguridad viene aquí?! Con esa cabeza podrida llena de engaños, ¿qué más estás tratando de hacer? Ahora es demasiado tarde, no importa lo difícil que se ponga, ¡El templo ha perdido poder y dignidad! ¡Son unos estúpidos pervertidos!”
“Tú...”
“Ella es nuestra madre, ¡¿Qué te ha dado el valor de hablarle así ?! ¡Es mi mamá! Es obvio que los idiotas que crecieron sin siquiera tener la atención de sus padres confesarán honestamente que están celosos al ver un trato como el que ella tiene con nosotros. Ella es mi madre, digan lo que digan, ¡cabrones que van a morir agarrándose a esta estatua de Nuestra Señora!”
“¡Oye…!”
“¡¿Eh…?!”
Me llamó la atención cuando los caballeros que corrían hacia el frente de la puerta abierta se horrorizaron todos a la vez y no lo disimularon en la expresión de sus rostros. Incluso Richelieu tenía un rostro que parecía como si hubiera perdido la cabeza ante ese comentario imprudente e incluso ingenioso, y solo estaba mirando fijamente a Elías.
Yo también perdí la cabeza por un instante, pero rápidamente recuperé el sentido y agarré el brazo de mi segundo hijo, quien parecía tener el impulso de querer silenciar al *“silencio” para siempre.
*Silencio o silencioso es el apodo que recibe el cardenal Richelieu.
“Elías, está bien. Puedo encargarme de esto. De todos modos, ya estaba a punto de irse.”
Elías seguía siendo feroz y celoso, pero en lugar de decir: “No me digas que hacer” o “Yo sé que decir, no tienes que decírmelo”, para mi sorpresa, no dijo nada más. Puse mi mano sobre el hombro de mi segundo hijo que ahora me estaba mirando con una mirada que parecía estar pidiendo algo, y sonrió vigorosamente.
“Eli está bien.”
Si está bien, todo está bien… Como acaba de decir Elías, somos, después de todo, una familia y, después de todo, soy la madre de estos niños.
Había una gran diferencia entre hacer tal promesa por mi cuenta y creer tanto por mi cuenta, y a pesar de las circunstancias, surgió una desgarradora sensación de alivio. Haríamos cualquier cosa para protegernos. Incluso si es una guerra contra la autoridad escolar.
* * *
“Me voy de aquí.” Dijo Nora.
Jeremy rápidamente agarró el brazo de Nora mientras gruñía y escupía y luego se dio la vuelta con un golpe y se estiró rápidamente.
Dijo Jeremy: “¡Ah, oye, no puedes irte así! ¡Somos camaradas después de todo!”
“Ven y duerme, ¿qué más puedes hacer en esta situación?” Replicó el joven lobo.
“¿Qué es? ¡Debes revelar la verdad como un caballero! ¡Sé valiente, puedes hacerlo!” insistió el joven león.
“¡Cállate, gatito rabioso!”
Mientras los dos caballeros discutían así, Theobald finalmente habló. El príncipe de cabello plateado habló en un tono flexible y comprensivo, como siempre.
“Aún te ves bien, Aunque no parece muy complacido conmigo, pero…”
No hace falta decir que Nora, que tuvo el impulso de salir corriendo de la habitación, evitando a su amigo que se aferraba desesperadamente, recibió un disparo de inmediato contra Theobald. Fue un impulso casi perdido, incluso si fue un evento violento aquí mismo.
Jeremy, quien miró al príncipe heredero con una expresión similar en su rostro, agarró el hombro de Nora con un gesto que pareció detenerlo con urgencia. Luego, con voz muy aguda, comenzó a murmurar: “No sé si Su Alteza está aquí por un negocio, pero está bien porque había muchas cosas que quería preguntarle. ¿Qué diablos estabas pensando al enviar un regalo tan engañoso a la madre de otra persona? ¿También estás involucrado en ese maldito juicio sagrado?”
Ante esta implacable acusación, Theobald enarcó sus cejas plateadas de una manera elegante: “¿Cómo puedo…? No, es más un regalo, ¿no?”
“¡Esto es, esto! ¡Su Alteza le envió!”
Jeremy, que tenía los ojos verde oscuro en llamas, dejó el collar que tenía en el bolsillo interior como si lo arrojara sobre la mesa. Doce diamantes gruesos y pequeñas águilas brillaron con un crujido.
Theobald miró el lujoso collar por un momento, luego se encogió de hombros y frunció el ceño con vergüenza en sus ojos dorados: “¿Por qué estás tan seguro de que yo lo envié?”
“¡¿Entonces su Majestad el Emperador envió esto?! La decoración del águila es exclusiva de la familia real…”
“No es que no lo sepa. Y hay otros príncipes además de mí. Parece que últimamente te has acercado bastante a mi pequeño hermano.”
“¿Vas a empezar a culpar a tu hermano ahora? ¡Dime que incluso el casino fue todo orquestado por Su Alteza Letrán! ¡¿Realmente te atreverías?!” Rugió el león.
“¿Casino?”
“Sí, ¿Acaso no recuerdas el pequeño trabajo de Ighoeffer? Nos ocupamos de ello también.”
Tenían mucha curiosidad por saber qué tipo de cosas quería lograr haciendo todas esas cosas hasta el extremo de permitir el uso de una casa de apuestas a jóvenes nobles. No es suficiente abrir una sala de juego si no también hacer que de a poco los jóvenes hijos de las casas nobles cayeran uno a uno, así que tenían mucha curiosidad por saber por qué llevó incluso a su propio hermano a una ruina como esa.
Le preocupa que Letrán parece haber tomado el juego como un pasatiempo, así que solo fue una persona que conocieron mientras intentaba seguirlo. Era el hermano de la Sra. Neuschwanstein, ¿cómo pueden ignorarlo? No importa lo que pienses de mí, pero tratar sobre ella era un asunto diferente…
“¿Qué quieres decir con que el pequeño dijo que Su Alteza personalmente se acercó y montó una casa de juego? Entonces…”
“No sé lo que esa persona dice, pero sólo estaba dando un poco de ayuda de una pena. Estaba realmente preocupado porque desapareció de repente, pero ¿tal vez ustedes hicieron eso? Entonces, ¿dónde está el pequeño ahora? No hiciste nada malo, ¿verdad?”
Jeremy hizo una pausa por un momento y luego comenzó a mirar fijamente a Theobald con sus ojos aturdidos. No hace falta decir que Jeremy nunca había tenido experiencia al enfrentarse a este tipo de discurso ingenioso que era difícil de expresar. A pesar de que era claramente culpa de la otra persona, se sentía como si este lado se hubiera convertido en el malo, y se sentía como si estuviera siendo arrastrado de una manera extraña.
Y fue una sensación muy desagradable y sucia. Si no fuera por el Príncipe Heredero, en este punto, probablemente ya lo hubiera desgarrado uno a uno sus miembros.
Por otro lado, Nora, que había sido sometido a tal retórica bastantes veces, estaba recuperando una expresión relativamente tranquila. Nora endureció sus ojos azules y rugió imparable en una bocanada de aire frío.
“Está en el río Danubio. Si todavía respira, debe estar atrapado en la introspección de por qué es tan estúpido.”
“¿Qué? No, entonces, ¿eres tú quien tocó al hijo del vizconde?”
“¿Por qué tienes curiosidad sobre el paradero del joven Ighoeffer?”
“Después de que terminó el juicio, no fue tan serio, así que traté de discutir con quién diablos era. ¿Pero se evaporó sin dejar rastro? Díganme, si ustedes realmente mataron a ese joven…”
“¿Lo matamos? Iba a matarlo, pero ese pobre cachorro de león también se lo dijo a los caballeros, ¿y pudo matarlo? No sé si siquiera puedo llamarlo u caballero después de verlo titubear de ese modo. De todos modos, desde el principio, la persona que le presentó la casa de juego a Su Alteza Letrán, sabemos quién fue…”
“Si te atrapan haciendo algo mal y quieres pedir disculpas, puedes usar lo que quieras. ¿Por qué iba a persuadir a mi único hermano para que hiciera algo tan peligroso? ¿Por qué diablos no te agrado tanto? Ojalá tuviera una forma de saberlo. En lugar de eso, ¿qué diablos hizo el vizconde? Realmente no lo mataste, ¿verdad?”
“¿Te estás preguntando por qué lo desapruebas tanto, pero no crees lo que estoy diciendo?”
“No es así, tú, francamente, eres igual a la hora de juzgar un duelo…”
“No, ¿por qué estás hablando de eso aquí? Por supuesto, la razón por la que este tipo hizo una matanza en ese duelo fue para advertirles que observaran con atención, ¿no? ¡Si no fuera por este tipo, lo habría hecho!”
“¡Para!”
El Duque, que había estado observando esta chispeante batalla de palabras con una expresión sorprendida, finalmente lanzó un rayo como si ya no pudiera escucharlo. En un instante, vino el silencio. En medio del silencio abrasador entre los tres jóvenes que eran el futuro del imperio, el Duque de mediana edad levantó la mano y se llevó la sien a la boca, dejando escapar un suspiro.
“Si todo el mundo habla así al mismo tiempo, ¿cómo diablos puedo entender lo que está pasando? ¡Sir Jeremy!”
“¿Sí?”
“¿De dónde diablos salió ese collar?”
“... Mi madre lo tenía. Iba a devolverlo, pero pensé que sería mejor para mí devolverlo ahora aprovechando la visita de su alteza, así que lo saqué ahora.”
A diferencia de Jeremy, quien respondió de una manera relativamente humilde, Nora estaba lleno de escalofríos y se alejó por completo de su padre. Y Theobald alzó los ojos dorados de par en par y miró a su estimado tío.
“Tío, no sé de qué se trata todo esto, pero es algo que nunca antes había visto.”
“¿Es esto realmente algo que no tiene nada que ver con Su Alteza?”
“Sí, de verdad…”
“Pero entonces, Su Alteza, ¿sobre qué estaba tratando de testificar al final del juicio divino?”
Ante esa pregunta, que había hecho el Duque, algo inesperado, con una voz muy tranquila, un momento de admiración pasó por el rostro de Jeremy, y la expresión de Nora se tornó levemente sobresaltada, y comenzó a mirar a su padre.
Y Theobald parpadeó.
“Yo solo… Desde que era niño, tuve una relación cercana con los niños de Neuschwanstein, por lo que estaba tratando de testificar que la acusación era, por supuesto, una tontería.”
“¿A pesar de que todo el mundo sabe que su relación con Sir Jeremy se ha roto durante mucho tiempo?”
“Incluso si las perspectivas no son muy buenas, quería intentarlo. En primer lugar, el juicio en sí se consideró absurdo e injusto.”
“Si ese fuera el caso, ¿no hubiera sido mejor para usted asistir al juicio desde el principio?”
“Por supuesto que lo es, pero…”
“Está bien, mi señor. En primer lugar, si ni Su Alteza, ni Su Alteza Letrán tienen ninguna conexión real con este collar, entonces debemos comenzar una investigación sobre quién se atrevió a usar el emblema imperial. Podría dar lugar a otro escándalo preocupante. Neuschwanstein y Nuremberg ahora son aliados, por lo que no se puede dejar pasar este asunto como si no fuera nada.”
La vista del Duque asintiendo alegremente con la cabeza y agarrando su lujoso collar emitió una extraña sensación de incongruencia que es difícil de describir. Por lo tanto, Nora miró a su padre con ojos llenos de extrema *desgane.
*Desgane: Estar enojado, retraído, triste, pero de repente debido a ciertas actividades volverse animado.
‘¿Por qué diablos está haciendo eso esa persona? ¿Qué estás haciendo esta vez?’ Lo mismo sucedió con Theobald, que estaba confundido.
En el sentido opuesto de Nora y que parecía ciertamente avergonzado, como si fuera un hecho totalmente sorprendente.
“Tío, creo…”
“Y Su Alteza, el problema de la casa de juego. Se desconoce cómo fueron las intenciones de Su Alteza de ayudar a Ighoeffer, pero es absolutamente ilegal administrar una casa de juego. Mucho menos, Su Alteza no es solo un joven noble, sino el Príncipe Heredero de este país. ¿Por qué no consideró eso cuando lo llevó a cabo?”
Un momento de vergüenza apareció en el rostro tranquilo de Theobald, pero desapareció rápidamente. El príncipe de cabello plateado capturó hábilmente su expresión y bajó los ojos.
“Sé que es mi culpa. Por un momento de simpatía... Pensé que un poco de ayuda financiera estaría bien.”
“¿Entonces estás diciendo que tocaste el tesoro del imperio para apoyar un acto tan ilegal?”
“... Lo siento. Nunca pensé que se malinterpretaría de esta manera.”
“¿Estás bien?”
“Sí, nunca imaginé que mi hermano o el hermano de Sir Jeremy irían y vendrían allí como resultado. Al final, lamento haber causado mala suerte a los niños pequeños. No sabía que mis malas buenas intenciones traerían tal resultado. No sé cómo reaccionaría el marqués si se enterara, que la matarían así... Oh, por supuesto, desde el punto de vista de Sir Jeremy, lo enoja porque su hermano está obsesionado con los juegos de azar…”
La figura de Theobald, con el entrecejo fruncido y la expresión empapada de remordimiento, se veía muy creíble, a los ojos de cualquiera parecía realmente triste. Parecía estar molesto porque algo que comenzó con buenas intenciones genuinamente salió mal. Así que Jeremy una vez más se estaba convirtiendo en una cara que estaba a punto de estallar, alegando que si no fuera por el Príncipe Heredero, lo habría rasgado con sus propias manos, y Nora estaba mostrando una mueca de disgusto.
Por otro lado, el Gran Duque de acero, mirando fijamente al Príncipe Heredero con sus ojos tranquilos, incluso suaves, finalmente comentó.
“¿Cuál crees que es tu asiento ahora?”
“¿Sí…?”
“Cualquiera que se haya atrevido a arrastrar al príncipe a una sala de juego tiene una sensación de disposición inmediata en el acto. El hermano menor de Sir Jeremy también hizo lo que se merecía como caballero del Emperador. ¿Cómo podía el Príncipe del Imperio hablar de matarlo por eso? ¿No sabes que una palabra sin sentido puede llevar a la participación personal de una persona que podría ser un apoyo para Su Alteza?”
“No yo…”
“Si Su Majestad el Emperador supiera sobre esto, ¿cómo reaccionaría? No importa si fue una coincidencia o no que Su Alteza Letrán entrara y saliera de la apuesta. El hecho de que Su Alteza el Príncipe Heredero estuviera involucrado de alguna manera es un problema en sí mismo. ¿Lo hiciste por simpatía? Si alguien que se sentará en el trono en el futuro está patrocinando un negocio ilegal por meras razones emocionales, ¿qué diablos pensaste de hacer algo tan decepcionante en una situación en la que el poder imperial es tan inestable?”
Ahora, el Duque no estaba hablando de una manera que favoreciera a ninguna de las partes. Cualesquiera que fueran los motivos o razones de ambas partes, estaban dando consejos extremadamente realistas y despiadados basados únicamente en el resultado del incidente.
Entonces no podrían pedir nada. No hay absolutamente ninguna objeción.
Jeremy se volvió hacia Nora y fingió abrir mucho los ojos. De cualquier manera, Nora se mostró aún más reacio que antes, y sus ojos se volvieron incluso extraños, y solo estaba mirando a su padre con pasión.
También es extraño. Incluso si algo es extraño, es muy extraño.
‘Esa persona debe tener otro plan. A no ser que...’
Hablando de Theobald, estaba tragando saliva seca desesperadamente. Aparte de que era la primera vez que tenía que enfrentarse a la apariencia sobria del Duque, no creía que las chispas sobre este asunto volvieran a él.
Si fuera el tío que conocía, hubiera sido más apropiado que él lo convenciera de la excusa de que había cometido un error con puras buenas intenciones. No es que esté tratando de abordarlo con una actitud distante y lógica. Es más, decepción, nunca imaginó que oiría una palabra así.
Mientras los ojos dorados del Príncipe Heredero temblaban como si hubiera ocurrido un terremoto, el Duque suspiró exhausto y miró a los caballeros que se habían puesto rígidos sin comprender.
“¿Qué le pasó al vizconde Ighoeffer?”
Jeremy y Nora intercambiaron una mirada por un momento. Jeremy respondió al lado de Nora porque él no estaba en posición de abrir la boca.
“Está afuera.”
“¿Qué?”
“Genial, por eso se le llama caballero, pero está en contra del espíritu de caballería matar a una dama o a cualquier ser indefenso, pero de cualquier forma está bien... Porque no quiero que vuelva a verlo la marquesa. Todavía estoy pensando en cómo deshacerme de él, pero me pregunto si puedo tomar prestada la profunda visión del Duque.”
Por alguna razón, el Duque respondió con un tono sumamente directo y serio a la lentitud que parecía halagadora.
“¿Descubriste algo?”
“No, también probamos la tortura, no, el interrogatorio para averiguar quién demonios se hizo cargo, pero no obtuvimos ninguna información útil.”
“Así es. En cualquier caso, existe una gran posibilidad de que vuelva a ser víctima de la madre del Señor en el futuro, por lo que creo que sería mejor enviarlo al exilio a la isla del Ducado. Eso sería más seguro que esconderlo en el Marquesado.”
Inesperadamente, Jeremy, quien se vio obligado a llevar el problemático problema al padre de su amigo cercano, no tuvo más remedio que abrir los ojos de par en par.
“¿Sí? Realmente es… ¡De hecho, eres el Duque de Acero, el lobo plateado!”
“No es como si estuviera tratando de recibir cumplidos de ustedes.”
Mientras Jeremy negaba con la cabeza tímidamente, el Duque volvió a mirar al príncipe.
“Y Su Alteza, malentendido o lo que sea, dado que Neuschwanstein considera que el remitente del collar es Su Alteza, debemos poner fin a este problema lo antes posible. El verdadero culpable será revelado tan pronto como prosiga la investigación de todos modos, pero si tiene alguna conjetura, por favor dígame aquí.”
“Pero yo…”
“Como Su Alteza sabe, la decoración del águila es un símbolo permitido exclusivamente a la familia real. Esto significa que no solo el creador de este collar, sino también la persona que recibió el regalo podrían ser acusados de traición. En este punto, la familia Neuschwanstein está cansada de tales trucos, por lo que no saben cómo reaccionar. En el peor de los casos, puede malinterpretarse que Su Alteza y la denominación haya ideado esta situación. Su Alteza debe haber adivinado el alcance de lo que sucedería si seguía provocando la guarida del león, que ya había sido expulsado de la defensa una vez. Entonces, si sabe algo, por favor dígamelo, incluso por el bien de la paz del país y la estabilidad del poder imperial.”
Mientras el joven león recordaba su sonrisa triunfante y estimulante, el joven lobo se estaba volviendo cada vez más aterrador en palabras. Cuando se trata de estos temas, agarra a su padre celestial por el cuello, lo sacude y le grita a la cara qué diablos está tramando.
Por el contrario, el lado del águila joven cayó en un *lodazal. Era solo cuestión de tiempo antes de que el Duque de Nuremberg decidiera comenzar a investigar el origen del collar. No sabía que lo malinterpretarían de que realmente estaba en juego tratándose de este tipo de asuntos. No tenía forma de saber por qué salía tan inusualmente, pero tenía que arreglarlo de alguna manera.
*Espacio/lugar lleno de lodo.
“Lo siento… Sí, tío. No fui honesto.”
El Duque miró al príncipe con los brazos cruzados. Sintiendo la mirada fría y azul que no se puede entender, Theobald tartamudeó con un rostro que parecía el único parecido con su madre biológica, ese rostro sucio.
“Realmente… Sé quién es el dueño original del collar.”
“¿Quién es?”
“Mi… Oh…”
No hace falta decir que los rostros de los dos caballeros aparecieron uno al lado del otro con una luz deslumbrante. Por otro lado, el Duque aún mantenía una expresión tranquila e inexpresiva.
“Pertenece a Su Alteza Letrán.”
“……..”
“……..”
“Sí. No sé cómo lo tomarás... De hecho, parecía que mi hermano tenía un amor joven por la marquesa. Debido a que es una persona tan hermosa, debe haber sido un vano sueño de un niño.”
“……..”
“De repente vino y dijo que quería hacer un adorno muy especial. Como tenía una idea clara de a quién enviarlo, por supuesto que me negué, pero me lo suplico desesperadamente, así que terminé conectando a un artesano que hacía joyas. Esperaba que fuera un adorno bastante lujoso, pero no esperaba que lo enviaran con una decoración de águila.”
“:… Entonces, Su Alteza, incluso mañana, por favor visite a Madame Neuschwanstein con Su Alteza Letrán.”
“... ¿Sí?”
“La sala de juego y el collar surgieron de la negligencia de ustedes dos. Debe tener en cuenta que no solo Su Alteza Letrán, sino Su Alteza el Príncipe Heredero también son responsables. Por lo tanto, acuda ante la marquesa lo antes posible, explíquele la situación y asegúrese de que tales malentendidos no vuelvan a surgir en el futuro. ¿Lo comprende bien?”
Pasó un silencio aún más extraño.
Los tres jóvenes ahora tenían la misma expresión uno al lado del otro, y solo miraban sin comprender al Duque. Era irónico que las razones fueran diferentes. Jeremy estaba literalmente admirado, Nora estaba completamente atónito y Theobald se encontraba en un verdadero dilema.
Estrictamente hablando, el Duque de Nuremberg tiene un rango más bajo que el príncipe heredero.
Theobald no está obligado a seguir las instrucciones directamente. Pero si no lo hacía, estaría admitiendo que lo que dijo hoy era una mentira. Si no hubiera mentiras verdaderas, sería una solución realmente clara y justa, pero aparte de eso, no hay otra trampa más peligrosa que esta.
“Entonces sé que lo eres, mi señor. Se hace tarde, así que creo que deberías volver al Palacio Imperial.”
“Oh, tío…”
“Pediré que le preparen un carruaje… ¡Aquí, preparen el carruaje para Su Alteza!”
Realmente fue una situación impecable. Sentía como si estuviera cayendo en una trampa, pero no había forma de salir de ella, así que se encontraba inquieto. Por lo tanto, Theobald no tuvo más remedio que irse a regañadientes, dejando atrás el repulsivo resplandor.
Después de que el Príncipe Heredero se fue, sudando profusamente, hubo un momento de extraño silencio entre las tres personas restantes. Jeremy, astutamente, puso una mano sobre el hombro de Nora, que estaba a punto de estallar, mientras el Duque medía la pipa con expresión pensativa. Al momento siguiente, Nora abrió la boca con una fuerza que no pudo soportar más y, al mismo tiempo, el Duque volvió a abrir la boca.
“Sir Jeremy. Parece que Sir y mi hijo se han encargado de todo por su cuenta.”
“Bueno, en lugar de…”
“Realmente no importa, pero sería mejor decirle la verdad sobre el pequeño trabajo a la madre de la marquesa. De todos modos, dado que son su sangre y su carne, tiene derecho de saberlo, ¿verdad?”
Jeremy negó con la cabeza.
“Tienes razón, pero…”
“Si fuera su madre Sir, lo sé, no se le culparía por eso, incluso si el señor hubiera ejecutado a su tía materna en nombre de Su Majestad el emperador. No hay secretos eternos. Cuanto más estrecha es la relación, más venenoso es el guardar secretos.”
“Padre, ¿qué vas a hacer? Si el Príncipe Heredero no sigue las instrucciones de padre, ¿qué hará entonces?”
Ante ese sarcasmo de Nora, que había estado allí de pie y mirando al Duque, se mostró verdaderamente desafiante, el Duque ladeó levemente la cabeza y miró gentilmente el rostro hosco de su hijo.
“Bueno, ¿qué debo hacer?”
No había amargura en la voz del Duque, que preguntó en voz baja.
Era como si volviera a pedir seriamente su opinión. Finalmente, Nora no pudo soportar más esta atmósfera desacostumbrada y abandonó la habitación como una tormenta.
Jeremy estaba perplejo.
“Ah, yo…”
“Déjalo. Supongo que debes regresar a casa en este momento. ¿No está preocupada por ti la madre de leones?”
Eso fue todo. Pero el cachorro de león vaciló como si tuviera algo más que decir en lugar de dar las gracias y dejar la guarida del lobo de inmediato. Así que el Duque se quitó la pipa de la boca y frunció el ceño con curiosidad.
“¿Tiene algo más que decirme, sir Jeremy?”
“Es decir… Duque, no sé cómo suena, pero hay algo que me gustaría preguntarle al Duque por separado.”
“……..”
“Escuché que el Duque era el mejor amigo de mi padre desde la infancia. Entonces… El testimonio de la vizcondesa Ighoeffer en el juicio…”
El Duque se sentó en silencio y miró fijamente al hijo de un viejo amigo con ojos difíciles de comprender. Debido a la juventud que recuerda y la juventud que saco como es.
“Duque… ¿Quién era exactamente mi padre, sabes?”
Después de todo, llegó a saber que el testimonio era verdadero. Aún así, Jeremy no pudo evitar preguntar. No podía entender lo desesperado que se sentía a pesar de que sabía que era la verdad, pero al mismo tiempo, era un sentimiento irónico que quisiera poner en su lugar a los demás.
Hubo un momento de silencio. Frente a la luz de la desesperación y la confusión que cruzó los ojos verde oscuro del joven, el Duque tuvo que tragarse un quejido.
‘¿Cómo diablos se supone que voy a responder a esta pregunta?’ No tenía ningún deseo de insultar a un amigo que había muerto frente a su hijo. Sin embargo, no hubo ganas de engañar al pobre joven, que ya había llegado a creer en algo, con mentiras torpes y bien intencionadas.
‘¿Quién hubiera imaginado cómo pesarían sus pecados sobre sus hijos?’ Era una historia de hace mucho tiempo, la historia de los padres. Y ellos, todos ellos, siguieron caminando interminablemente en su lugar. Atrapados por los recuerdos congelados del pasado, otros no podían mirar hacia atrás y vivían solo con viejos recuerdos.
Cuántos corazones se rompieron durante ese tiempo que no se dio cuenta.
El Duque parpadeó con fuerza cuando sintió que su respiración se sofocaba de repente. Los pecados de los parientes muertos, los pecados de los parientes que ahora están sentados en el trono, e incluso sus propios pecados, estaban todos entrelazados, y se sentía como si su pecho estuviera enredado como cadenas.
‘Johan, Maximilian. ¿Qué diablos le hemos hecho a nuestros hijos…?’
“… Johan era una persona diferente a la que tú piensas.”
Eso fue todo lo que pudo decir el Duque. El caballero rubio no hizo más preguntas, lo saludó cortésmente y se despidió.
* * *
“... ¡Porque odio los nabos! ¡Esto solo lo comerían los herbívoros!”
“Oye, Rachel, ¿no crees que eres una verdadera leona o sí?”
“Prefiero vivir como una verdadera bestia que como un potrillo como mi hermano pequeño.”
“¡¿Qué cosas dices?! ¡¿Un potrillo yo?! ¡Deberías comer esto!”
‘¿Fue un error ofrecer una ensalada de nabo que incluso era buena para la salud y al mismo tiempo previene las caries por la noche?’ No sé cómo los niños, que estaban sentados y hablando de nabos y herbívoros, mientras yo miraba unos documentos, de alguna manera empezaron a arrojarse nabos picados unos a otros.
De todos modos, el trozo de nabo relativamente grueso que Elías le tiró a Rachel era tan ancho que voló por los aires, y al menos golpeó a Jeremy, que acababa de entrar en ese momento, auténticamente... Era obvio, pero Jeremy lo agarró con fuerza.
“¿Qué es esto?”
Jeremy, que casi había sido golpeado en estado salvaje en el momento equivocado, parecía muy molesto. Nadie que supiera su estado de ánimo le habría dado ese tipo de bienvenida.
En cualquier caso, no hace falta decir que Elías y los gemelos se levantaron de sus asientos y rápidamente huyeron ante la vista de la figura demoníaca de Jeremy, aplastando un trozo de nabo con una mano y mirando a sus hermanos con ojos terriblemente abrasadores.
“Ya es tarde. ¿Dónde has estado?”
“Salí por un rato... ¿Por qué todo el mundo no está durmiendo todavía?”
“Tengo que ir al Parlamento mañana. Tus hermanos menores dijeron que no podían dormir todavía y decidieron acompañarme con un aperitivo, pero al final, así fue como sucedió. ¿Y tú? ¿No tienes hambre?” Cuando pregunté con una sonrisa, Jeremy quiso mirar fijamente mi rostro, luego se acercó lentamente a mí y se sentó donde Elías había estado sentado antes.
Para ser precisos, se sentó en el asiento a mi derecha en el medio de la mesa. Y luego decía esto todo el tiempo.
“… Sabes, Shuli. Tengo una confesión que hacer.”
‘¿Confesión?’
Inmediatamente dejé los papeles en mi mano y abrí mucho los ojos. Jeremy, por otro lado, mantuvo la mirada baja como si evitara la mía a propósito.
La apariencia de apretar y abrir los puños mientras tomaba aire uno tras otro no parecía inusual en absoluto. De repente, surgieron preocupaciones dentro de mí.
‘¿Qué? ¿Acaso has vuelto a tener una pelea a puñetazos con Theobald por que encontró el collar de diamantes?’
“¿Jeremy? ¿Qué pasa? ¿Qué sucede?”
“... Bueno, no sé cómo confiar para poder decirte esto…”
“¿Qué es?”
“Esto… si yo… si yo maté a tu hermano…”
Hubo silencio durante un rato. Jeremy ahora había bajado la mirada, examinando mi expresión, mientras yo intentaba adivinar el significado de las palabras que acababa de escuchar.
‘¿Mi hermano está muerto? ¿Nuestro Jeremy lo ha matado?’
“El casino donde Elías y el príncipe Letrán solían ir y venir... Pertenecía a ese humano. Hablando de eso, es complicado, pero creo que no es bueno mantenerlo vivo de todos modos…”
“……”
“Lamento ser grosero. Simplemente no quería que te importara de ninguna manera. Así que lo manejamos nosotros mismos y lo tiramos al río... Lo siento mucho por eso. Incluso si dices que no quieres volver a verme, no tengo nada que decir.”
“……”
“Dime algo, Shuli. Por favor di algo.”
Negué levemente con la cabeza y cerré boca que hasta el momento mantuve abierta. Cuando me encontré con esos ojos verde oscuro que temblaban violentamente por la ansiedad, como si estuvieran siendo torturados, la conmoción comenzó a remitir gradualmente. El Jeremy que conocía no era el tipo de persona que se culpaba a sí mismo de esta manera, lo miraba de cerca y no sabía qué hacer. ¡Dios mío, Dios mío!
“Oh, Dios mío, Jeremy, tú... ¿Estás bien?”
“… ¿Eh?”
“No, quiero decir, por supuesto, eres un caballero con experiencia práctica, y no es la primera vez que matas a alguien... oh dios mío ¿qué diablos es esto? ¿Cómo lo digo? De alguna manera, cuando lo busque nadie supo darme ningún dato sobre él y ahora tiene sentido…”
Jeremy me estaba mirando con una expresión en blanco en su rostro mientras yo balbuceaba con las manos en la cabeza.
“¿Una búsqueda?”
“¿Sí? Oh, no sabía que otra cosa podría pasar si dejaba a los miembros de mi familia sueltos por ahí, así que ordene una búsqueda… De todos modos, tú y Nora se encargaron de esto, ¿verdad? ¡Vaya, ¿qué diablos es esto?!”
“Lo siento, de verdad…”
“No, no… Es mi culpa por no decirte qué tipo de personas era mi familia original desde el principio. Debería haber pensado de antemano que algo así podría suceder algún día. ¡Pero no es motivo para involucrar a Nora en esto también…!”
No importa lo que otros puedan pensar, no sentí simpatía ni pesar por el hecho de que mi hermano hubiera muerto. Puede parecer despiadado, pero incluso este final inesperado me tranquilizó. Solo me preocupaba que la sangre estuviera en las manos de aquellos a quienes más apreciaba.
“¿No estoy enojada…? Aunque era de mi sangre, él nunca me trató como familia…”
“¿Por qué no estás enojada? ¡Por supuesto que sé que tengo la culpa en esto! Sé lo que pasó en ese casino. Todo lo que tu hermano tuvo que ver en ello. Estoy enojado con mi estúpido hermano que terminé con las manos manchadas de sangre, y estoy enojado conmigo mismo. Para el Príncipe Heredero, que obviamente estaba involucrado en el asunto de alguna manera, y con todos los padres que ni siquiera sabían lo que sus hijos estaban haciendo regularmente. ¿Sólo entonces podremos decirte qué pasa?”
Tragué un suspiro y me levanté. Luego me acerqué a mi orgulloso hijo mayor, cuyos ojos brillaban de confusión y letargo, que no le quedaban bien, le rodeé la cabeza con los brazos y le di unas palmaditas. Su cuerpo tembló mucho.
“¿Shuli...?”
“Sé que lo hiciste por mí. Así que no hay necesidad de culparte a ti mismo. Hiciste lo que tenías que hacer por tu familia.”
‘Así que no había culpa alguna… ¡Todo es culpa de los adultos que ni siquiera sabían lo que estaba pasando bajo sus pies! Maldita sea, supongo que a mí también me falta disciplina.’
Jeremy trató de ponerse rígido por un momento, como si estuviera avergonzado, luego, vacilante, levantó su brazo y lo colocó contra mi cuerpo. Hacía calor. La calidez y la estabilidad que nunca me dieron personas de mi misma sangre. Entonces, sintiendo la calidez del otro, por primera vez, compartimos nuestros sentimientos sobre su maldita prueba divina.
“Yo soy… ... Teníamos miedo de perder…”
“Yo también.”
“Shuli, solo digo esto por si acaso... Si incluso una parte de lo que dijo tu madre fuera cierto, si mi padre alguna vez hiciera algo malo contigo, yo…”
Negué con la cabeza, levanté la mano y la pasé por su hermoso cabello dorado rizado. Si hay algo de lo que no me he arrepentido de nada en toda mi vida pasada y presente, debe ser el hecho de haber criado tanto a este chico.
“Es natural que todos quieran que los padres que dieron a luz sean seres humanos perfectos. Jeremy, no tienes que culparte por eso. Incluso si tu padre fue una mala persona para mí, ese es nuestro problema. No se trata de ti y de mí.”
* * *
Por lo general, una viuda joven como yo disfrutará de una tranquila hora del té con otras mujeres de ideas afines en una hermosa mañana de otoño, o irá a ver los últimos vestidos de moda con una hermosa hija en la pubertad. No con hombres viejos, vestidos de negro, de mente cerrada y casi cargando una guadaña al hombro mientras se reunían en el salón del consejo, donde holgazaneaban y participaban en brillantes peleas para hacer crecer su ego.
De todos modos, sería extraño de nuevo si el ambiente no fuera sangriento como fue el primer parlamento después del Santo Juicio. Los seis jefes de cada familia, incluyéndome a mí, y los siete cardenales están todos enredados en sus complicados intereses y hoy están poniendo sus días en este punto. Para empeorar las cosas, la bomba acababa de hacerse pública.
“... ¿Qué tipo de comentarios sin sentido se están haciendo en este momento para un cambio de impuestos de repente?”
“Tú eres el que te dije. Se ha decidido reducir el impuesto sobre la renta, el impuesto a la propiedad y el diezmo de 15 gremios y minas de oro propiedad de Neuschwanstein por debajo del 50%. Entonces, o lo adapta en consecuencia, o paga el extra que restaba Neuschwanstein.”
De generación en generación, la familia Neuschwanstein pagó tasas de interés más altas que cualquier otra persona en la capital. Hubo muchos casos en los que la renta imponible se redujo tanto como fue posible, pero no tuvo precedentes en el caso de un recorte de impuestos que proclamaba abiertamente como lo estoy haciendo ahora.
“No, Señora. ¿Cómo puede decir que procedió con un asunto así de forma independiente sin discutirlo con el parlamento?”
“Parece haber un precedente para la realización de trabajos de forma independiente sin discutir con los miembros del parlamento, pero con Duque Heinrich.”
Como respondió con un tono cínico, uno de los cardenales, como era de esperar, saltó de inmediato.
“Lady Neuschwanstein, ¿A qué se refiere con lo que acaba de decir?”
“Significa literalmente. ¿Cuándo ha debatido la denominación un problema nacional importante con los miembros del Parlamento?”
“¿Cómo se atreve a informar primero al Parlamento del asunto que está considerando el Santo Padre?”
“¿No se conoce el asunto que Su Majestad el Emperador está considerando en menos de medio día? ¿Es usted un fiel seguidor de Su Majestad, o sólo tiene al Santo Padre como el único a seguir?”
“¡Está hablando demasiado, señora!”
“No, la señora Neuschwanstein tiene razón. Una explicación detallada de por qué los subordinados no llevaron el asunto del Santo Juicio al consejo por adelantado parece ser la prioridad.”
“¿Qué? No importa cuánto el consejo, ¿cómo se atreve a interferir en las decisiones de Su Santidad? Si el Conde de Baviera estaba tan insatisfecho con eso, ¡¿por qué mantuvo la boca cerrada el día del juicio?!”
“Creo que es mejor que los nobles que se apresuraron a ver a Lady Neuschwanstein sin ninguna prueba o testigos justificables, ya que solo me preocupaba por la seguridad de mi familia. Si todos los miembros del Parlamento no pueden discutir las decisiones de la Santa Sede, e incluso la cuestión de llevar al jefe de una familia noble al tribunal, ¿cuál es el significado de que sus subordinados se sientan aquí?”
“¡¿Ya terminaste de hablar?!”
“¿No pueden todos ser un poco más educados?”
Los cardenales y jefes de familia que gruñían en una pelea de bolas de nieve ante el sonido de la orden de fuego emitida por el presidente del consejo mientras golpeaba la varita del médico con todas sus fuerzas, cerraron la boca por un momento y miraron a la persona sentada en la sede del consejo al mismo tiempo. El Duque de Nuremberg, que de repente se convirtió en un aliado conmigo debido a una situación de prueba.
“¿Cree que la afirmación de la señora Neuschwanstein, Duque de Nuremberg, es plausible? ¡Di algo!”
El Duque de acero respondió sin vacilar un momento a las palabras que el Duque Heinrich había gritado con voz burbujeante. Es decir, él dijo: “Si todos los miembros de la Cámara de Representantes siguen a la familia Neuschwanstein y establecen la *tasa impositiva, no habrá ningún problema. Aquellos que se dan cuenta pueden pagar un poco más que la tasa impositiva original.”
*En el primer método, la autoridad impositiva calcula sus gastos totales en un período dado. Luego divide esa cifra por el valor imponible o tasado de todas las propiedades de la jurisdicción. El resultado es la tasa impositiva.
“¿Qué? No pero…”
“Como referencia, la familia Nuremberg participará en el cambio de impuestos como aliada de la familia Neuschwanstein. Deje que cada uno decida por sí mismo.”
... No hace falta decir que hubo una escena en la que pensé que todos estaban tratando de mostrar el tamaño de sus bocas. Sin mencionar que era extremadamente raro que el Duque de Nuremberg lanzara un sarcasmo descarado de esta manera. No importa cuánto entramos en un estado de solidaridad, no sabía que él tomaría tal actitud, así que estaba agradecida.
“No, Duque de Nuremberg, ¿cómo incitó usted, como presidente, a una división en el parlamento? No importa lo cercana que sea la alianza…”
“El Duque Heinrich parece haber estado ansioso por traer a su única hija a Neuschwanstein, así que ¿no requeriría más esfuerzo que simplemente sentarse y ver el juicio en cuestión?”
“¡¿Qué?! ¿Has terminado de hablar ahora?”
“¿Qué harías si es que ya terminé?”
El Duque Heinrich le abrió los ojos al Duque de Nuremberg con una fuerza viciosa para arrojar un cenicero de inmediato, pero rápidamente puso los ojos en blanco. Incluso las peleas de bolas de nieve deben realizarse mientras se cubre al oponente.
Aunque los Duques de Nuremberg y Heinrich pertenecían al mismo ducado, diferían mucho en términos de prestigio y ubicación. Aparte de la ventaja de ser pariente de la familia imperial de generación en generación, las habilidades personales de Nuremberg como jefe de estado también eran muy diferentes.
A diferencia del Duque de Acero, que es un maestro de los cuchillos hasta los huesos y no pestañea sin importar quién sea su oponente, el Duque Heinrich habría sido mucho mejor para él y para los demás si hubiera nacido como el segundo hijo. Dejando a un lado sus quejas personales por su actitud mezquina en el Santo Juicio.
De todos modos, mirando la reacción de todos, parece que no esperaban que yo viniera aquí. ¿Pensaron que incluso si pasa por un incidente de este tipo, si me persuadían con moderación, pasaría como si nada hubiera pasado?
Fue entonces cuando de repente sonó la voz baja de un hombre que había estado silenciosamente solo en medio de un espectáculo de fuegos artificiales.
“Incluso si hace concesiones para los impuestos sobre la renta y la propiedad, los diezmos y otros impuestos no se ven comprometidos. El diezmo es la prueba de la fe que se debe pagar como ciudadano leal y creyente, sobre todo si alguien que ha provocado un escándalo ético…”
“¿Que acabas de decir?”
Todos los ojos se volvieron hacia mí cuando salté de mi asiento. Para ser más precisos, todos estaban con la vista fija sobre el cardenal Richelieu, que hablaba tranquilamente, y de mí, que estaba teniendo el mismo impulso.
Quizás fue por la certeza de que nadie me creería si le hubiera hablado de su visita el día anterior, Richelieu siguió hablando, manteniendo su expresión sombría y sumisa en el rostro.
“No quise referirme específicamente a nadie. Solo…”
Di un paso y caminé hacia él. Una voz casi gruñona salió de mis dientes.
“Su gracia, cardenal Richelieu. ¿No le han enseñado que los verdaderos creyentes nunca deben tener una sola duda sobre el resultado de un duelo en honor al que Dios decide el ganador? ¿O quieres afirmar que incluso se han introducido trucos del diablo en ese caso?”
“Yo soy…”
“¿Quién más aquí tiene alguna duda sobre el resultado de la prueba de duelo?”
Hubo un silencio con una tensión difícil de expresar. Incluso si es raro verme ardiendo al borde de una explosión, ¿quién puede levantar una vaga sospecha como esa mientras el padre del ganador del duelo está mirando con los ojos bien abiertos?
Me reí a carcajadas y luego miré directamente al rostro endurecido de Richelieu.
“Como jefe de una alta familia aristocrática y miembro del Parlamento, que ha sido humillado sin previo aviso, no encuentro ningún motivo para seguir asistiendo a este Parlamento, donde los subordinados están sentados sin su clemencia. Si incluso uno de ustedes tiene alguna duda sobre el resultado del juicio, no tengo ningún deseo de discutir el asunto del país con esa persona. ¿Lo sabías? Ya no hay razón para participar en una reunión que es menos que una fiesta de bromas infantiles.”
“Señora, usted tiene derecho a salir del Parlamento a voluntad…”
“No es una resignación, es una ausencia continua. Por favor, no me pida que vuelva a ir y venir a este tipo de reuniones, a menos que el Emperador me llame personalmente.”
Después de poner silencio en la sala de estar, giré mi cuerpo rápidamente y di un paso.
El Duque de Nuremberg, que había estado observando el salón con ojos desconocidos, también se levantó y me siguió fuera del salón del consejo. Lo mismo sucedió con los otros jefes de familia que estaban mirando. Incluso el Duque de Heinrich llegó con estética y se retiró detrás de nosotros, aunque era tarde.
“Lady Neuschwanstein. Me daría un momento…”
Cuando salía del palacio Badenberg y caminaba directamente hacia el carruaje, el Duque de Nuremberg me atrapó. Fue una expresión de algo inusual.
“¿Duque?”
“Señora, ¿No ha tenido a nadie del Palacio Imperial como visita?”
“¿Se refiere a alguno de los príncipes…?”
“Sí, por ejemplo, una visita repentina, una cita para asistir al palacio.”
“Bueno, cuando lo comprobé esta mañana, no había cartas del Palacio Imperial. ¿Por qué?”
Cuando hizo la pregunta mientras inclinaba la cabeza en un estado de ánimo perplejo, el Duque se tocó la barbilla con la mano por un momento y se quejó. Fue una reacción extraña como si supiera que lo haría, pero al mismo tiempo, era inusual ver sus ojos azules hundirse con frialdad.
“¿Duque? ¿Qué está pasando?”
“... Eso es, Señora. Ese collar de diamantes que llegó a sus manos.”
“¿Sí? No, ¿Usted cómo lo sabe Duque…?”
“En realidad, Sir Jeremy vino anoche. Aparentemente, el Príncipe Heredero estaba en nuestra casa y se encontraron ahí…”
‘¿Qué fue lo que paso?’
La historia que me contó el Duque fue más o menos así. Jeremy y Nora fueron a buscar el consejo del Duque, pensando que Theobald y la Iglesia podrían haber estado relacionados con el collar, pero resultó que Theobald estaba allí en ese momento.
Y Theobald afirmó que el remitente del collar era el príncipe Letrán. Por eso el Duque convenció a Theobald de que fuera a verme con Letrán y me explicara…
‘¡Estos chicos!’
Miré al Duque a los ojos por un momento, luego noté que estábamos pensando lo mismo.
“Realmente no podría ver que Su Alteza Letrán tuviera esa clase de sentimientos por mí. ¿Cree que enviaría un collar como ese…?”
“Tampoco creo que el pequeño príncipe Letrán hiciera eso. Pero no sucederá, pero si los dos príncipes realmente son enfrentados mientras están juntos, ¿podría decirme exactamente qué estaba pasando con ellos? ¿Cómo se ha comportado el príncipe heredero?”
“Eso... Pero, ¿qué dijo Su Alteza el Príncipe Heredero sobre la casa de juego, el casino?”
“... Bueno, eso es todo lo contrario de lo que le dijo a usted antes. Es una excusa tan absurda que ni siquiera puedo recordarla correctamente.”
La expresión del Duque, respondiendo en voz baja, fue bastante complicada. Es como una expresión confusa que parece estar enojada o empapada de remordimiento. Luego dejó escapar un suspiro que sonó como un gemido.
“¿Por qué mientes así…?”
Recordé las palabras que Nora había mencionado hace un rato. Sobre lo que más odia el Duque.
Quizás, este era un tema en el que toda la confianza que se había construido a lo largo de los años podría destruirse en un instante. Si, por alguna razón, él Duque hubiera comenzado a ver a través de las partes que no había visto correctamente, si hubiera comenzado a reconocer la sensación de incongruencia que habría sentido al menos una vez en los últimos años, habría sido imposible saberlo lo que pasaría en el futuro.
‘¿Lo sabe Theobald? ¿Qué sus mentiras se sienten como heridas sobre la piel? Perder a Nora fue una gran pérdida a largo plazo para el Príncipe Heredero. Ha pasado mucho tiempo desde que perdió a Jeremy también. Mientras tanto, si incluso el Duque le da la espalda…’
Obviamente, Theobald jugó un papel importante en llevar la relación entre el Duque y Nora a este punto. Con solo mirar sus acciones y miradas el día del duelo, tuve una idea aproximada. Incluso si la responsabilidad recae completamente en el propio Duque, la tormenta causada por las secuelas nunca sería leve si se diera cuenta de cómo lo había maltratado su sobrino a quien había querido.
“¿Que te gustaría que hiciera?”
Los ojos del Duque que me interrogaban de repente eran aterradores. Era una pregunta bastante aleatoria, pero entendí el significado de esa breve oración y la respondí con la mayor sinceridad.
“No conozco los detalles de la historia, pero... No se rinda, no importa lo difícil que sea. Incluso si es un hijo, el Duque no tiene derecho a darse por vencido.”
* * *
El primer evento nacional a principios de otoño después del festival de verano es el banquete de cumpleaños de la Emperatriz Elizabeth. Ha sido un evento anual, pero este año, especialmente porque fue el primer evento oficial después del juicio divino, estuvo lleno de tensión.
Por supuesto, Elizabeth, que no parece tener nada que ver con ese tipo de atmósfera, respondió a mi pregunta sobre qué sería bueno para un regalo de cumpleaños, diciéndome que asistiera o que lo hiciera correctamente porque no necesita un regalo.
Tenía que presentarme aunque realmente no quería hacerlo... Si realmente iba con las manos vacías, definitivamente.
De todos modos, dejando de lado todas las demás complejidades por un momento, una de las mejores cosas de este evento formal para mí fue pensar en vestidos y zapatos que le quedaran a Rachel. Grande, grande, hija mía. Se adapta bien a cualquier cosa, pero se siente como si estuviera jugando con una muñeca…
“Señora.”
Estaba mirando a través de un dibujo de diseño de zapatos de vidrio para mi hija, que es coleccionista de zapatos, cuando el caballero comandante Albert y el mayordomo Robert vinieron a verme. Es raro que estos dos vengan a verme al mismo tiempo, así que pregunté de inmediato.
“¿Finalmente encontraste a mi padre?”
“Algo como eso.”
“¿A qué te refieres?”
“Sobre eso, mi señora, verá…”
Albert tomó la iniciativa al explicar lo que Robert estaba tratando de decir, interrumpiendo rápidamente.
“Como resultado de la búsqueda según las instrucciones, se obtuvo información de que estaba siendo detenido por el Gremio Moonshoe en el área de Louisville, y un pequeño número de caballeros de élite fueron enviados rápidamente allí. Como resultado de retroceder, estaba claro que desapareció cerca de allí…”
“Vine aquí por mis propios pies. Señora. Justo afuera de la puerta, está un hombre que dice ser el vizconde Ighoeffer. Por supuesto, desconocemos si es él o no.”
“Señora, si está relacionado con el Gremio Moonshoe de alguna manera, puede decir que ya ha llegado tan lejos como un noble. Ya sea que la persona fuera de la puerta sea el propio vizconde o no, no creo que sea necesario que lo enfrente.”
Fue un consejo sensato. Mi padre jugador, que había estado indeciso durante años, finalmente llegó a ese punto. No era algo que esperaba, pero nuevamente, me preguntaba por qué todos los miembros de mi familia eran así.
De todos modos, teníamos que dejarlo claro, a menos que fuéramos a tomar medidas para asegurarnos de no volver a vernos. Habiendo tomado esa decisión, dejé mi libro de diseño y me levanté.
“Tendré que comprobarlo primero. ¿Dónde está ahora?”
* * *
“¿Por qué es necesario correr para el manejo de la espada?”
“La resistencia es la base más básica de todas las artes marciales. La resistencia de Su Alteza es tan débil que ha estado empuñando una espada desde el primer día.”
“Pero soy bastante bueno tirando con arcos, así que mi fuerza física es bastante buena, ¿no es así? Uh, incluso el entrenamiento más simple…”
“Disparar un arco y sostener una espada son cosas completamente diferentes. Puedo entender el deseo de agarrar la espada en este momento, pero si mueves tu espada imprudentemente en tu estado actual, sentirás dolor durante unos días.”
“Uh, pero…”
“Deja de lloriquear y corre. Cinco vueltas.”
El príncipe de 15 años, incapaz de quejarse más por esta orden implacable, comenzó a correr por el gimnasio bien mantenido para los Guardias. Jeremy, que miraba a la débil figura con los brazos cruzados y lo miraba con bastante seriedad, finalmente se rió de la risa.
“Oh, recuerdo cuando era más joven. Cuando aprendí a usar la espada por primera vez, corrí como un loco. ¿Qué se siente al ser el maestro del príncipe?”
“Un maestro es un maestro a voluntad. Molesto… Solo intento darte un poco de ayuda.”
“De todos modos, eres sorprendentemente muy dócil. Ojalá mi hermano pudiera ser tan lindo.”
“Si el pony pelirrojo de tu casa se vuelve obediente, será un poco doloroso verlo como está.”
“Así es. Oh, pero, sabes que eres un sirviente silencioso, ¿verdad?”
El giro algo abrupto de Jeremy en los acontecimientos hizo que Nora frunciera el ceño a Letrán, que ahora estaba jadeando sobre el tema sobre dos ruedas, en lugar de mirarlo fijamente.
“¿Hay alguien que no lo sepa? ¿Pero por qué?”
“¿Qué sabes en detalle? Sobre esa persona…”
“Bueno, como es bien sabido, el hecho de que tenía un nudo en la boca y que era un cardenal de élite favorecido por el Papa a una edad temprana. ¿Qué pasa? ¿Es él siquiera el juez de la obra de teatro?”
“Es algo que aún no sabemos, pero es lo suficientemente sospechoso como para venir y pedir una audiencia con nuestra Shuli.”
“¿Qué? ¿Cuándo?”
“Cuando nos reunimos con el Príncipe Heredero en tu casa. Shuli no entró en detalles sobre lo que estaban hablando, pero por lo que parece, está claro que él estaba detrás de eso. No sé por qué.”
‘La razón…’ Nora se palmeó la barbilla por un momento y reflexionó. De repente, un recuerdo pasó por su mente. Recuerdos del banquete del Día Nacional de la Fundación, el joven cardenal hablando con Shuli durante mucho tiempo en el salón de banquetes.
Mientras tanto, Jeremy parecía haber entendido mal el silencio de su amigo. El joven león se acercó lentamente a su amigo con una sonrisa de satisfacción, examinó su rostro y murmuró en voz baja.
“No, solo estaba preguntando,…preguntándome si podrías saber algo más. Ni siquiera necesitas hablar con tu padre si no quieres. Bueno, parecía alguien sorprendentemente flexible, pero…”
“¡Cállate, bastardo! Todavía es sospechoso, ¿cuál es la trama, se está volviendo loco?”
“Ah, sorpresa. ¿Qué? ¿Sospechas?”
“¡Es sospechoso porque de repente estás haciendo algo que nunca antes habías hecho! Con solo mirar lo que hice en el pasado, empiezo a preguntarme si he tomado algún medicamento o si ya estoy senil. ¡Maldita sea, me está dando todos mis saludos matutinos esta mañana! ¡No me sorprenderé! ¡¿Qué diablos está haciendo?!”
En general, es muy irrazonable considerar los saludos matutinos de un padre a su hijo como un signo de senilidad o algún tipo de truco. Pero en lugar de señalarlo, Jeremy intentó disculparse por mencionar el tema sin sentido. Solo estaba tratando de decir esto.
“En ese sentido, hoy tengo que deberle un poquito a tu casa.”
La expresión de Jeremy se distorsionó de inmediato ante la proclamación que Nora, que había estado rechinando bruscamente sus ojos azules durante mucho tiempo, pronunció de la nada.
“¿Qué? Oye, ¿qué tipo de refugio es mi casa? Incluso en tu casa, de todos modos, tendrás que reunirte con tu padre tarde o temprano...”
“¿Cuál crees que es la razón por la que tu casa puede seguir siendo tuya?”
“¿Qué…?”
“La razón por la cual la hermosa Señora, que es la que mantiene cálida tu casa como una cueva de bestias, puede estar plenamente presente en este momento es por mi contribución. ¿Pero quieres decirme que deberías volver felizmente solo y dejar que noona y yo coqueteamos solos los dos? Nunca sucederá, nunca sucederá. Incluso si me entra suciedad en los ojos, no puedo dejarlo solo con ella.”
Jeremy se quedó aturdido por un momento y se limitó a mirar a Nora con ojos aturdidos.
‘¿Qué acaba de decir este bastardo?’
Se podría decir que esta es la primera vez que este problema resurge entre los dos desde el juicio divino. Debido a que había tantas cuestiones de las que preocuparse, ambas partes declararon en secreto un alto al fuego, algo similar a una tregua total. Por cierto…
“Nora, diablos, ¡Nora…! ¡je je...! Yo, ¡cinco vueltas, vamos, vamos…!”
Si no hubiera sido por Letrán, que estaba a punto de quedarse sin aliento al mismo tiempo, gritando de dolor y brillantes ojos redondos, los dos caballeros habrían continuado una lucha silenciosa de bolas de nieve hasta que se puso el sol.
Jeremy le dijo solo unas pocas palabras a Letrán mientras Nora le dedicó una sonrisa muy benévola a su primo, y luego se dio la vuelta y salió furioso.
‘No sé qué plan oscuro tiene ese cachorro de lobo, pero tendré que seguir adelante y aferrarme a mi madrastra, que parpadea inocentemente sin saber nada.’
Jeremy, quien se apresuró a dar un paso con tal determinación, pronto fue atrapado por una persona no deseada. Para ser más precisos, trató de evitarlo desde lejos, pero por otro lado, de todos modos, en términos de estatus, el oponente que tiene una posición muy superior primero agitó su mano y fingió conocerlo descaradamente, ¿cómo podría simplemente ignorarlo? ¿Eso?
“No sabía que nos encontraríamos aquí.”
“... Eso es. Más bien, Su Alteza, ¿cuándo planea visitar a mi madre con su hermano? Debes hacerlo hoy.”
Ante el estremecimiento muy agudo que Jeremy lanzó con los brazos cruzados, Theobald quiso hacer una pausa por un momento y luego volvió a sonreír con gracia. Y Jeremy empezó a pensar que, de no haber sido por el Príncipe Heredero, habría tenido suficiente para arrancarle esa sonrisa hasta los oídos.
“Bueno, ¿no es esto más divertido que eso?” Preguntó Theobald.
“El rostro de Su Alteza no me evoca sentimientos muy agradables.” Rugió el joven león.
“... Parece que realmente no sabes quién es tu verdadero enemigo.”
“¿Qué tipo de juego de palabras es ese?”
Quizás sintió una pizca de irritación en el rostro del caballero rubio, o por alguna razón, el príncipe de cabello plateado quería suavizar un poco su sonrisa, y luego mostró una mirada un poco seria.
“¿Sabes por qué mi tío fue amable con tu madrastra?”
“… ¿Qué?”
“Oh, tu amigo y yo no creemos que el término “*guerra subjuntiva” se haya acuñado por nada.”
*Guerra subjuntiva: Que es momentáneo, temporal.
“¿De qué estás hablando ahora…?”
“Jeremy, ¿puedo contarte un dato divertido sobre todos nuestros padres?”
Jeremy ahora estaba sorprendido y miraba al Príncipe Heredero frente a él. Por otro lado, Theobald todavía tenía una expresión relajada en su rostro.
“... Realmente no quiero saber.”
“Debes tener curiosidad. Quieres decir, ¿sabes por qué tu padre se casó con tu madrastra?”
“……..”
“¿Quieres saber algo interesante?”
* * *
En un crepúsculo rosa, el marqués de Neuschwanstein parecía más una pequeña fortaleza de un cuento de hadas que un título grandioso de la guarida de leones. Era raro encontrar una casa que fuera tan grande y espléndida al mismo tiempo y tuviera una sensación tan cálida.
Incluyendo su propia casa.
Superando sentimientos tan amargos, Nora se bajó del carruaje y encontró algo inquietante frente a la puerta del marquesado.
No era nuevo ver que los caballeros que custodiaban la entrada a la guarida del león lo miraban con disgusto. Sin embargo, en este momento, las garras de Neuvanstein mostraban ojos tranquilos y esperanzados al ver al joven Lobo, en lugar de la mirada hostil de siempre.
Quizás el duelo de honor contribuyó mucho al cambio de opinión entre los caballeros de esta casa.
En cualquier caso, Nora no respondió con una cálida sonrisa a estos raros letreros de bienvenida, sino que volvió su mirada hacia el hombre de mediana edad que parecía un vagabundo, apoyado contra la pared junto a la puerta. No hay forma de que esos caballeros dejen que algún vagabundo ruede frente a la puerta, así que, ¿quién diablos está mirando a todos con solo los ojos de una estricta vigilancia?
“¿Qué es esto?”
Al oír los murmullos de Nora, el vagabundo, que se había estado adormeciendo con el olor nauseabundo del alcohol como si hubiera bebido desde primera hora de la tarde, se despertó. El hombre de mediana edad, que parecía extrañamente familiar, parpadeó por un momento y quiso mirar al joven que lo estaba mirando, y luego se levantó al momento siguiente.
“¡¿Eres tú?!”
“¿Qué?” Preguntó Nora.
“¡Sí, tiene usted razón! ¡Debes poder ver esos ojos azules! ¡Si hombre! ¡Ustedes rompieron mi casa y se fueron! ¡¿Dónde dejaste a mi esposa?! ¡¿Dónde está mi hijo?!”
Los caballeros se movieron rápidamente para agarrar al hombre, pero Nora levantó una mano para detenerlos. Se preguntaba dónde lo vio y ahora lo entiende.
En ese momento, tenía un extraño parecido con ese tipo.
‘Es el vizconde Ighoeffer.’
“Oye, ¡¿lo sabes ahora?! ¿Quién diablos ordenó? ¡¿Lo hizo mi hija?! Este tipo parece un parásito…”
El vizconde Ighoeffer, ya sea porque estaba demasiado borracho o genuinamente indignado, gritó al azar y se apresuró a entrar sin siquiera considerar la diferencia de tamaño entre él y su oponente. Por lo tanto, Nora frunció el ceño ante el hedor apestoso y, sin retroceder, naturalmente levantó las piernas y pateó al loco vizconde.
“¡Agh!”
No fue pateado muy fuerte. Los testigos presenciales también coincidieron en ese punto. El único problema era que el vizconde estaba demasiado borracho, y que el vizconde, que se tambaleó hacia atrás y se derrumbó, tuvo la cabeza golpeada contra la puerta de hierro ortodoxa.
Hubo un golpe, un ruido majestuoso, y luego la sangre comenzó a brotar de la cabeza del vizconde, que gritó. Al mismo tiempo, el caballero comandante y jefe de esta casa apareció desde el patio delantero y las escaleras que conducían directamente a él.
“¿Qué es esto…? ¡Oooh! ¡¿Padre?!”
Mientras Nora se quedó atónito por un momento y no pudo ayudar, Shuli dejó escapar un breve grito y corrió escaleras abajo. Asombrada por sus ojos brillantes mientras miraba a su padre, quien se había derrumbado con sangre goteando de su cabeza.
“No, noona, esto no es lo que crees…”
“¡¿Que están haciendo todos ustedes? ¡Vamos dentro! ¡Vamos rápido!”
* * *
Los pasillos del Palacio Imperial no eran significativamente diferentes de los pasillos de otras familias nobles. Si tuviera que elegir uno, sería el esplendor del nicho y el marco, y la identidad de las personas en el marco.
En cualquier caso, no fue necesario mirar todos los retratos de estas numerosas familias reales sucesivas. Solo había una cosa que llamó la atención, y fue la de una mujer que se jactaba de tener una presencia única entre todos estos hermosos retratos.
En el mismo momento en que fijó su mirada en la mujer sonriente en el retrato, el pensamiento que vino a la mente de Jeremy fue: ¿Por qué está aquí el retrato de su madrastra? Luego se dio cuenta de que había un mal entendido.
La mujer del retrato se parecía exactamente a alguien que estaría en su casa hoy, pero había una clara diferencia.
Su cabello púrpura plateado, ojos color limón, el grado de hinchazón de sus mejillas y, sobre todo, la sonrisa en sí era diferente. Su madrastra no era el tipo de persona que se reía lastimosamente así.
“Esta…”
“La difunta Emperatriz Ludovica. Es mi madre biológica.”
Theobald, que llegó con una copa de vino, se paró a su lado y miró los retratos uno al lado del otro. Quizás fue por la iluminación del candelabro, los ojos dorados suavemente curvados instantáneamente se parecían a los ojos limón de la mujer en el retrato.
“Se enamoró de su Majestad Maximilian, el padre de tu mejor amigo, e incluso de tu difunto padre. ¿Quizás está en tiempo presente?”
Jeremy se quedó mirando fijamente el retrato con una expresión completamente perdida en su rostro. Los ojos verde oscuro estaban completamente en blanco.
“¿No estás muy sorprendido? Entiendo. También me sorprendió mucho al principio. Puedo entender por qué tu padre fallecido se volvió a casar y con tu madrastra.”
“……..”
“En cuanto a mi madre actual, por supuesto, siente un profundo odio por esta persona. De mi tía... que sería similar De todos modos, no es descabellado hacer eso, pero él también fue una víctima, y es una lástima que lo odien tanto a veces.”
“… ¿Eres una víctima?”
El príncipe heredero asintió con la cabeza como si hubiera estado esperando esa pregunta, que finalmente escupió el caballero rubio.
“Los tres mejores hombres del imperio que no tienen nada que lamentar quieren a una mujer al mismo tiempo, ¿qué tan ruidoso debe ser el proceso? Al final, la ganadora fue mi mamá, pero creo que probablemente no sea la persona que mi madre biológica realmente quería. Podría ser tu padre, podría ser mi tío…”
Theobald, con una cara llena de satisfacción, giró la cabeza para mirar directamente a la cara de Jeremy.
“Porque somos solo nosotros, hablo con franqueza, pero ¿no es como una verdadera guerra menor? A veces me pregunto si existe el destino.”
“…….”
“No sé cuánto sabe tu amigo sobre esto. Quizás mi tío quiera que su hijo también gane esta vez. Quizás los ricos esperan lo mismo al mismo tiempo. Para ser honesto, se parecen mucho.”
Jeremy, despacio, muy despacio, desvió la mirada.
Al final de su mirada, donde la llama lenta comenzó a vibrar, estaba la elegante sonrisa de Theobald.
“Eso... ¿De qué diablos estás hablando?” Preguntó Jeremy.
“Bueno, solo estoy considerando todas las posibilidades. Si no fuera por el aviso de mi tío, ¿tal vez él quizás habría estado ansioso por hacer de tu madrastra su amante antes?”
“……..”
“En ese sentido, no te veo como un impuro, incluso si realmente sientes algo por tu madrastra. Porque tu lado es bastante puro. No voy a decir que tengo un corazón puro, pero soy diferente a otras personas que tienen la edad suficiente para hacerlo.”
“… Ni el Emperador ni los Duques parecen considerar a mi madre de la misma manera.” Dijo Jeremy.
“¿De verdad piensas eso? ¿Incluso viendo esto? ¿No es obvia la respuesta con solo mirar el caso de tu padre?”
“……..”
“Si las cosas salieran mal durante esta santa prueba, no sé en quién caería tu madrastra. En realidad, fue un poco extraño que Nora saliera como si estuviera esperando en ese momento. Todas las condiciones son tan perfectas. Es como tejer y golpear.”
“……”
“Ustedes saben muy bien que es imposible para mí interferir en los asuntos de la Iglesia de ninguna manera. Solo quiero que estés bien... Solo quiero ser un buen rival. Hemos estado muy unidos desde que éramos pequeños.”
Jeremy permaneció en silencio durante un rato, mirando al príncipe heredero frente a él. Luego, de repente, levantó una mano, agarró el cuello de Theobald y lo golpeó con fuerza contra la pared.
Para ser precisos, lo tiró por la mitad. Era una pared gruesa de lana de damasco, por lo que el sonido no era muy fuerte, pero el impacto era seguro.
Literalmente medio arrojado contra la pared, Theobald apenas se mantuvo erguido sobre ambos pies.
Sin darle a su oponente la oportunidad de despertar, Jeremy marchó hacia adelante, con los ojos encendidos y una sonrisa verdaderamente espeluznante.
“Su Alteza. No sé de dónde vienes, pero mi madre es mi madre. No importa cuánto lo intente, ni siquiera puedo decirme a mí mismo qué locura estaré haciendo si soy torpe con mi madre y conmigo.”
“Yo, yo…”
“Si pensaras que este tipo de caos funcionaría para mí, estarías muy equivocado. Parece que su guerra subordinada solo se aplica a su Alteza y Su Majestad el Emperador, que no tiene ningún interés en Su Alteza en absoluto. Parece que está lo suficientemente desesperado como para insultar al Duque, que se ha ocupado tanto de los arreglos de Su Majestad el Emperador, con una hazaña tan frívola.”
La voz de Jeremy era firme y baja, pero la vida abrasadora que acechaba en ella era abrumadora.
Fue una fuerza aterradora que pareció dividir el cuerpo del Príncipe Heredero de la cabeza a los pies en este lugar. Entonces, Theobald sintió un sudor frío corriendo por su nuca y tragó saliva seca.
“Yo solo…”
“Y hay una cosa en la que estás profundamente equivocado, y la persona que es tu madre biológica y mi madre no son muy similares. ¿Cómo te atreves a comparar? Una tonta jugada más con mi madre, y romperé tu musculoso pico en pedazos para siempre. ¿Lo sabías? Esto es una amenaza, no una advertencia.”
Theobald no emitió ningún sonido, como si se hubiera congelado en el acto. Si hubiera querido, podría haber llamado a los guardias afuera de la puerta de inmediato. Sin embargo, el caballero frente a él estaba escupiendo imparablemente una vida espantosa que dejaría a otros incluso destrozados por los guardias.
La bestia furiosa en sí, fue la bestia misma la que hizo que el poder de todo el cuerpo se endureciera con solo estar bajo su mirada.
Tan pronto como Theobald apenas asintió con la cabeza de arriba abajo y fingió mirar, Jeremy se dio la vuelta y salió del maldito lugar. Era porque si no lo hacía, podría terminar haciendo algo que aún no había hecho hace tres años y tirarle los dientes al príncipe heredero.
Se sintió como si estuviera en ruinas porque su corazón estaba destrozado por una tormenta salvaje de ira y tristeza.
Estaba claro que cualquiera de sus amigos que conocía aún no se había dado cuenta de este hecho. ¿Cómo reaccionaría si se enterara?
No se puede decir que el sonido de la charla de Theobald sea una tontería. O una subguerra. Sin embargo, Jeremy se sintió extremadamente repugnado por expresiones tan superficiales.
Shuli no fue la ex Emperatriz que murió. Ninguno de ellos era como sus padres, todos eran seres diferentes.
Así fue.
Mientras luchaba con la culpa y el remordimiento, Shuli lo abrazó y dijo que estaba bien. Mientras los pecados de su padre pesaban sobre sus hombros, Shuli lo consoló de nuevo, diciéndole que de todos modos no tenía nada que ver con él y su relación.
Pase lo que pase, pase lo que pase, por el bien de ella que lo abrazó, tenía que permanecer como familia para siempre. Incluso si su existencia le impedía anhelar a otras personas para siempre, siempre que el vínculo entre ellos no se cortara para siempre, estaba decidido a contentarse con ello.
Tenía que ser amada incondicionalmente, brillar y ser feliz con quien fuera a conocer en el futuro.
Así que se quedaría dónde está ahora y lo haría posible.
* * *
“¡¿Padre, padre?!”
“Ustedes... Ustedes… ¡Yo...!”
Cualesquiera que hayan sido las últimas palabras de su padre, no duraron.
Para cuando llegó el senador, a más tardar ya era demasiado tarde. Había agujeros en la cabeza de su padre que parecían marcas dentadas cuando golpeó la escultura de la puerta de hierro.
Así que murió con demasiada sencillez, empapando toda la ropa de cama en sangre. Sus ojos saltones y sus vasos sanguíneos abultados parecían más aterradores que cualquier cosa que hubiera visto antes. Sus brazos estaban todos cubiertos de sangre.
No recuerda lo que dijo y envió a todos los empleados y caballeros fuera.
En cualquier caso, ella se sentó junto al cadáver de su padre, media aturdida y rara.
Su hermano murió y también su padre. Su madre también se encontraba en una situación en la que no sabía si estaba viva o muerta. Aquellos que eran al menos sus parientes consanguíneos más cercanos encontraron un final trágico en sus intentos de acercarse a ella. Y no han sido su familia durante mucho tiempo.
Sin embargo, ha pasado mucho tiempo desde que se dio cuenta de lo tonta que es la palabra “familia.” Sin simpatía ni dolor por su tragedia...
‘¿Por qué siguen fluyendo lágrimas de mis ojos?
¿Por qué tengo un sentido del humor tan desconcertado y aturdido, a pesar de que eran personas que nunca habían sido realmente miembros de mi familia, e incluso peor que otras?’
Un olor a sangre le picó la nariz. Todas las cosas que han sucedido desde que de repente regresó en el tiempo pasaron por delante de sus ojos.
Todos los cambios y todas las comedias y tragedias la dejaron sin aliento.
Después de todo eso, todavía sobrevivió. Y realmente, la única familia que quedó a su lado fueron los niños que Johan había dejado atrás. Pero sin embargo…
“… ¡Noona!”
La voz urgente de Nora atravesó sus nebulosos sentidos. Un joven de cabello negro entró corriendo, la agarró, empapado en la sangre de su padre y comenzó a escanear su rostro a fondo.
“Noona... Ha, lo siento. Todo es mi culpa. Es intencional, no, probablemente sea irrelevante. Porque el hecho de que maté al padre de mi noona no cambiará. El hermano de mi noona también es…”
“…….”
“Maté la sangre de mi hermana a voluntad. Maté arbitrariamente al hermano y al padre de mi noona, y también envié a la madre de mi noona. No sé cómo pedirle perdón a mi noona, pero yo…”
“... No.”
“¿Sí?”
Lentamente, lentamente, negué con la cabeza y miré hacia los ojos azules que brillaban violentamente. Una voz seca y aguda salió de mi boca abierta.
“... No sé si lo prefería de este modo... Entonces esto de haberlo matado. Solo…”
“……”
“Quería preguntarle una última vez por qué hiso eso... Lamento no haber podido hacerlo.”
Aunque sabía la respuesta que obtendría si le preguntara por qué no la amaba, aunque era su hija.
Quizás el miedo que aún acecha en las profundidades de su abismo no desaparezca para siempre. El miedo a ser abandonada en cualquier momento.
Desde que los padres que la dieron a luz la abandonaron, siempre estaba temblando de miedo a ser abandonada por todos. De su marido, de sus hijos…
Y recuerda que los niños la abandonaron antes de que regresara.
Sí, esos recuerdos fueron los más fuertes. No importa cuánto trató de pensar, ni siquiera sabía si todavía estaba vagando por sus sueños pasados todas las noches debido a esos recuerdos que aparecían inconscientemente.
‘Tal vez no fui tan maternal como los demás pensaban.
Todo lo que he hecho por los niños, la razón por la que he sido tan cariñosa desde que regresé, bien puede haber sido puro miedo egoísta. Sin mis hijos, no sería nada. Porque no hay ningún lugar adonde volver.’
‘Mi esposo era un hombre amable, pero la razón por la que me amaba era simplemente porque me parecía a su primer amor.’
Siempre existió el temor de que nadie la mirara atrás si se convertía en ella misma en lugar de una mujer que se parecía al tierno primer amor de alguien o una amorosa madrastra.
Irónicamente, parece que ese miedo fue al menos compensado el día del juicio divino.
Ese momento en el que el hombre frente a ella dio un paso adelante como un caballero de sui honor. Un hombre que no tuvo nada que ver ella y que estuvo dispuesto a arriesgar su vida por ella, cuya sangre está en sus manos en este mismo momento por mi culpa.
Nora quiso mirarme a los ojos por un momento mientras sostenía mi cara con ambas manos, luego se sentó en una silla cercana y agarró mi cuerpo y lo puso en mi regazo. Luego, sosteniendo la parte superior de mi cuerpo con un brazo, comenzó a limpiar las manchas de sangre de mi cuerpo con un pañuelo. No me resistí y me quedé quieto.
“... Ya ni siquiera puedo decirte que lo siento.”
“¿Lo siento…?” Preguntó el joven lobo.
“Tus manos están manchadas de sangre por mi culpa.”
“Soy el caballero de mi noona. Lo hice todo por mi decisión.”
Su mano gentil me tocó. Era cuidadoso y delicado, como si estuviera manejando un frágil cuenco de vidrio. Esa bondad me ahogó por un instante.
“… Si continúas estando a mi lado así, pueden suceder innumerables cosas similares en el futuro.”
“Está bien. Alguien está planeando destruirme, te verás en vuelto. Ya sea la Familia Imperial o la Iglesia... No importa, quieren reducirme a cenizas…”
“Entonces, ¿qué hay de mí? ¿Qué puedo hacer por ti...?” Pregunté.
“Puedes quedarte así. Como hasta ahora... De forma segura, hermosa y…” Me respondió Nora.
Su mano se detuvo por un momento. Los ojos azul oscuro que se inclinaron hacia mí de repente brillaron con el anhelo violento y oscuro que había visto por primera vez.
Al momento siguiente, el cabello negro pareció cubrir su visión y un aliento caliente golpeó su oído.
“Solo mirándome a mí…”


