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 “Escuché que su cuerpo de mercenarios había vencido a los extranjeros que habían invadido las provincias del norte.”


“Sí…sí fuimos nosotros, Su Majestad.”


La voz de Hospe se quebró mientras hablaba. No eran malas personas e incluso habían ayudado al Imperio… si no me hubiera pisado ayer por error, habría sido una reunión perfecta hoy.


Lloyd no tenía que haber participado en el torneo ayer en primer lugar.


“Solo hay unos cuantos de ustedes, pero son muy buenos.”


“Estoy honrado.”


Quería escapar de esta atmósfera incómoda. Si hubiera sabido que el Emperador estaba trabajando, nunca habría venido a comer bocadillos. Más aún, si hubiera sabido que se encontraría con Hospe.


Mientras el sudor frío se deslizaba por mi espalda, Argen apoyó la barbilla en su mano y mordió la galleta.


[‘¿Qué hizo mal?’]


[‘¿Huh?’]


[‘Solo piso mi pie por accidente.’]


[‘Fue un error, pero Lloyd lo tiró al suelo.’]


Cuando dije que era una respuesta excesiva mientras temblaba, Argen negó con la cabeza y partió una galleta por la mitad. Metió la otra mitad de la galleta en mi boca y susurró en voz baja.


“Solo pretende que no lo conoces. Pretende que no lo recuerdas.”


Ayer tenía un color de cabello diferente, pero no hay forma de que no me recuerde… cuando miré a Argen, habló con una voz que parecía frustrada.


[‘Solo actúa como si no recordaras nada.’]


[‘Es una buena idea…’]


[‘No vamos a reunirnos con él de nuevo de todas formas.’]


Pronto, el Emperador habló mientras cruzaba las piernas y se frotaba la barbilla.


“Aparte de hoy, ¿no nos conocimos también ayer?”


“¡S-su majestad…!”


“Debes recordarlo.”


“En ese momento, ¡no sabía quién era y cometí un grave crimen!, por favor, perdóneme solo esta vez…”


Comprendí muy bien lo que Hospe estaba pensando en ese momento. Cuando el Emperador estaba inexpresivo, parecía que desenvainaría su espada y cortaría a todas las personas frente a él en cualquier momento, por lo que su miedo era comprensible.


“Nunca esperé verte de nuevo en un lugar como este.”


Lloyd, que estaba a mi lado, le dijo a Hopse.


Tampoco esperaba volver a verlo aquí. Después de escuchar su voz, pareció que Hopse finalmente se dio cuenta de quién era el hombre que había atrapado ayer.


“Lo siento… lo siento…”


Me sentí mal cuando vi al mercenario arrastrarse por un error que había cometido por accidente.


Miré la superficie lisa del pudín de leche y levanté una cuchara.


“Originalmente, te iba a enviar al bosque donde aparecen los monstruos.”


“¡Ah!”


“¡Ah tal…!”


La respuesta de los mercenarios fue sutil, así que no pude averiguar si les gustaba u odiaban la idea. Mientras estaba comiendo pudín, el Emperador de repente se acercó y nos hizo un gesto para que fuéramos hacia él.


Cuando Argen se levantó y se sentó en su regazo, el Emperador frotó suavemente su mejilla izquierda con el dedo índice. Como estaba en medio de mi pudín, permanecí en mi lugar.


“¿Acabas de despertar?”


“Sí…”


Me froté la boca con el dorso de la mano por vergüenza. Las doncellas vinieron rápidamente y me limpiaron la boca con una toalla húmeda.


A diferencia de mi marca de baba, Argen tenía una huella de almohada en su rostro.


Me quedé mirando a la criada que me estaba limpiando la boca con una toalla húmeda. ¿¡Por qué no me lo dijiste a pesar de que habías visto mi cara todo este tiempo !?, estaba tan avergonzada que incluso tomé el pudín de Argen.


“Ah… continua hablando.”


El Emperador sostenía a Argen con sus brazos y procedió a escuchar la historia del mercenario.


Mientras Argen se sentaba en el regazo del Emperador y miraba a los mercenarios con simpatía, me traje todos sus postres.


[‘No comas esos.’]


[‘Hmm…’]


[‘Es mío.’]


[‘No voy a comerlos.’]


[‘Acabas de comerte uno justo ahora.’]


[‘Las galletas cubiertas de azúcar estaban deliciosas.’]


[‘…’]


Sin conciencia, tomé uno de los bocadillos de Argen, me lo metí en la boca y lo mastiqué. Después de agregar azúcar en mi té para satisfacer mi gusto, volví la cabeza y miré a los mercenarios que todavía estaban hablando con el Emperador.


“Me pregunto si la persona que se había atrevido a pisar el pie de mi hija sería capaz de derrotar a los monstruos correctamente.”


La mercenaria junto al Hospe dio un paso adelante con valentía. La voz sarcástica del Emperador casi provocó que volviera a surgir mi hipo.


“¡Nuestro líder puede haber cometido un error, pero sus habilidades son insuperables!”


‘Estaba sorprendida de verla actuar tan valiente. ¿Qué pasa si el Emperador se enoja?’


Por supuesto, Argen y yo estábamos aquí, así que trataríamos de detenerlo de alguna manera…


“¿Estás diciendo que la persona que fue derrotada por mi hijo es el líder del cuerpo mercenario?”


Sabía muy bien que el Emperador está desahogando su ira en este momento. ‘¡No tienes que decir eso!’


Me levanté y caminé hacia Lloyd.


“Definitivamente fui dominado por el príncipe heredero, sin embargo, no perderé incluso si lucho con los caballeros.”


Cuando me acerqué, Lloyd me susurró como si estuviera contando una historia secreta.


“El líder de allí es un mercenario muy fuerte.”


“¿En serio?, ¿qué tan fuerte?”


Todavía no podía olvidar que el líder fue arrojado al suelo por Lloyd sin ayuda de nadie ayer.


“Es el mejor entre todos los actuales mercenarios.”


“…”


“Son las personas más fuertes del imperio en este momento.”


Para derrotar a un hombre así con una sola mano… una vez más, vi a Lloyd bajo una nueva luz. Mientras tanto, el Emperador sonrió y señaló a los mercenarios con su dedo índice.


“Eso es bueno. Si puedes luchar contra mis caballeros y ganar, parece que valdrá la pena reconsiderarlo.”


“…Si esa es la voluntad de Su Majestad… haré lo que sea necesario.”


“Me gusta tu actitud. Ve al centro de entrenamiento y consigue ocho caballeros.”


Ante esas palabras, Hospe se tragó el aliento. El Emperador barrió el contorno de su barbilla y sonrió. Argen me miró mientras se movía en los brazos del Emperador.


“No deberías ser el único que tiene valor. Demuestra también el valor de tus subordinados.”


“…Por supuesto.”


Tan pronto como Argen me vio dando un aplauso entusiasta a Hospe, que estaba asumiendo un desafío imprudente, negó con la cabeza.


* * *


Los caballeros imperiales eran fuertes.


Los caballeros incluían tanto a nobles como a plebeyos, porque incluso en un imperio que valora el linaje, los caballeros y magos eran seleccionados basándose únicamente en sus habilidades.


Había aprendido anteriormente que nuestro imperio es el único imperio que entrena a caballeros y magos sin separar a los nobles de los plebeyos.


“Es mejor quedarse aquí si quieres ver el duelo.”


El Emperador, que se había trasladado al centro de formación, tomó una silla y me dijo que me sentara en ella junto a Argen. Miré al Emperador mientras me preguntaba si nos dejaría ver el duelo.


No sería un duelo tan terrible, ya que los participantes solo llegarían a infligirse heridas entre sí en lugar de quitarle la vida a su oponente.


“Esa no es una espada, es un hacha, ¿no es así?”


“Una batalla entre un hacha y una espada está bien.”


El Emperador se rió cuando vio a Hospe sacar dos grandes hachas de detrás de su espalda. Aunque estaba un poco nerviosa por el duelo, me senté cómodamente ya que no estaba en juego la vida de nadie.


Sin embargo, en realidad estaba sentada al filo del asiento.


Esta situación había ocurrido por mi culpa. Si esos mercenarios pierden ante los caballeros, no podrán recibir su recompensa y todo será en vano.


Mientras el Emperador peinaba mi cabello con sus dedos, un caballero se quitó la armadura y desenvainó su espada. Mis ojos se iluminaron porque parecía que finalmente era el comienzo de una batalla emocionante.


“Es un hacha…”


De los diez mercenarios, ocho se estaban preparando para luchar, pero por alguna razón, ninguno de ellos tenía espada.


Había un hombre con un látigo, una mujer con un arco y otro hombre con una cuerda blanca pura.


“No olvides que te estás batiendo en duelo frente a su majestad el Emperador.”


Nuestro caballero levantó su espada correctamente y le dijo al mercenario. La diferencia de tamaño entre el gran mercenario y el caballero parecía ser casi el doble.


“Entonces, empecemos.”


Mi corazón martillaba mientras miraba el duelo.


Tan pronto como el Emperador dio la orden directa, la espada del caballero se movió con golpes voladores. Por supuesto, su espada fue bloqueada por un gran hacha. Tan pronto como su espada fue bloqueada, el caballero tiró suavemente su espada hacia atrás, chocando contra el borde afilado del hacha.


El mercenario respiró pesadamente y levantó su hacha con una mano. Luego, agarró el hacha restante con la otra mano, luciendo bastante intimidante.


“¿Puedes manejar estas hachas con solo una espada?”


Cuando Hospe se burló con esas palabras, el caballero rechinó los dientes con ira.


Fue entonces cuando comenzó el verdadero enfrentamiento. El caballero sacó una pequeña daga de su funda y se movió rápidamente. Sin embargo, el mercenario fue igual de rápido, lo que no se ajustaba a su enorme tamaño.


El caballero corrió hacia adelante y atacó con su espada como si estuviera tratando de cortar un brazo, pero Hospe blandió su hacha ampliamente, evitando el amenazante ataque.


“… ¿No es este un duelo en el que no deberían lastimarse el uno al otro?”


Cuando le pregunté a Argen, quien estaba concentrado en la batalla, se volvió hacia el Emperador.


El Emperador me dio una respuesta sin dudarlo.


“Se golpean el uno al otro sabiendo que pueden evitarlo. Normalmente, no deberías luchar con un arma que no sea una espada, pero… es divertido, así que no importa.”


Justo cuando el Emperador terminó de hablar.


«¡Crack!»


En el momento en que miré nuevamente hacia el duelo, la hoja del caballero se había roto en dos pedazos con un fuerte sonido.


“…”


“…”


“Se acabó.”


El Emperador barrió mi flequillo y habló como si ya hubiera esperado este resultado. Comenzó a hablar mientras miraba hacia adelante, mostrando su nariz finamente esculpida


“Lord Kedra, parece que necesitas entrenar un poco más.”


“Perdóneme, Su Majestad…”


Después de eso, comenzando con la primera batalla, los mercenarios comenzaron a derrotar a cada uno de los caballeros uno por uno. Por supuesto, ninguno de los caballeros era muy hábil, pero el hecho de que los mercenarios derrotaran a los caballeros seguía siendo un gran problema.


“Es increíble…”


“Es cierto.”


Miré al Emperador, preguntándome si estaba de mal humor, pero no pude descifrarlo debido a su rostro tranquilo e inexpresivo. Al final, después de que todos los mercenarios ganaran, solo quedó un frío silencio.


“¿Dijiste que eras Chechario?”


El Emperador habló con los mercenarios empapados en sudor, llamando su atención. La mujer de cabello verde, que había hablado con valentía antes con el Emperador, respondió.


“…Sí, me llamo Chechario.”


“Tienes muchas habilidades.”


“…Gracias.”


“Sin embargo, no planeo contratarlos como mercenarios.”


¿El Emperador está hablando en serio?, ahora que lo pienso, dijo que lo reconsideraría, pero nunca dijo que los aceptaría.


El Emperador se acercó a mí, me tomó en sus brazos y se sentó donde yo había estado sentada originalmente. Después de una breve pausa, volvió a hablar.


“En cambio, prefiero contratarlos como guardias del palacio imperial.”


Un frío silencio se sintió.






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